El presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, advirtió el sábado a los líderes opositores venezolanos que eviten las provocaciones y midan sus críticas, tras señalar que el fallecido presidente Hugo Chávez era el “muro de contención” de muchas de las “ideas locas” que se le ocurrían a sus partidarios.
Por Jorge Rueda/ Associated Press
Cabello, uno los aliados más cercanos de Chávez y fugaz mandatario interino tras el golpe de Estado de 2002 que separó por casi dos días al líder socialista del poder, expresó que sus herederos políticos “vamos a seguir la obra de Chávez; así nos cueste la vida, lo vamos hacer. Estamos convencidos de lo que vamos hacer y lo que tenemos que hacer”.
“Yo les digo señores, ustedes tenían que haber rezado mucho para que Chávez siguiera vivo. Señores de la oposición porque Chávez era el muro de contención de muchas ideas locas que a veces se nos ocurren a nosotros”, dijo Cabello, sin dar detalles, en un acto en la ciudad central de Maracay, a unos 130 kilómetros al oeste de Caracas.
El acto fue encabezado por el presidente encargado Nicolás Maduro.
Chávez prometía convertir a Venezuela en un Estado socialista. Sin embargo, pese a las nacionalizaciones y los cada vez mayores controles gubernamentales, en muchas oportunidades dio marcha atrás a medidas impopulares, y el equilibrio entre los sectores público y privado de la economía no cambió mucho durante sus casi 14 años de mandato.
“El presidente imponía su liderazgo, su prudencia y su conciencia y nos evitaba actuar en muchas ocasiones. (A) los que menos les conviene decir que Chávez no está con nosotros es a ustedes, señores de la oposición”, acotó el legislador, quien rechazó un mensaje escrito el viernes por el alcalde opositor del municipio capitalino de Sucre, Carlos Ocariz, quien criticó a un grupo de artistas que declararon en días recientes su apoyo al gobierno y a la candidatura presidencial de Maduro.
Ocariz no estuvo disponible para un comentario. El alcalde, al referirse al apoyo de los artistas escribió: “En la ‘cultura’ muchos tienen precio. A 500 mil BsF (bolívares fuertes) la tarifa para comprar la conciencia”.
El vicepresidente Maduro, a quien Chávez designó como su sucesor, asumió el cargo de presidente encargado el 8 de marzo y tres días después fue postulado como candidato oficialista para los próximos comicios del 14 de abril. Chávez murió el 5 de marzo a raíz del cáncer que lo aquejaba desde el 2011. La Constitución contempla que las elecciones se realicen dentro de los 30 días siguientes a la ausencia del jefe de Estado.
Los venezolanos acudirán a las urnas para elegir al sucesor del mandatario fallecido y aunque la campaña no empieza formalmente sino hasta el 2 de abril, los candidatos Maduro y el líder opositor Henrique Capriles, al igual que los miembros de los comandos de campaña de ambos, han cruzado diversas acusaciones que han elevado la temperatura política del país.
Capriles perdió los comicios en los que Chávez consiguió su tercera reelección el 7 de octubre pasado. La diferencia fue la más estrecha en comparación a sus anteriores reelecciones, 1,5 millón de votos, pero muchos analistas coinciden en que Maduro podría conservar ese capital electoral y que el fallecido mandatario sigue siendo una fuerza entre sus seguidores.
“Señores de la oposición en verdad en este revolución el cuerdo (prudente) es el presidente Chávez que nos ha enseñado, nosotros hemos tratado de aprender con él. No se metan con un pueblo, no se metan con el que está tranquilo y está quieto”, insistió.