Lapatilla
“Este que está aquí sale a marchar mañana sin miedo de nada y con la esperanza de encontrar un futuro mejor”, se despedía Bassil Da Costa a diez para las siete de la noche de este martes 11 de febrero en su cuenta de Facebook.
Un venezolano más que muere producto de la intolerancia, de un país cargado de balas y escaso en harina. Paz a sus restos.