El secretario general de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), Ernesto Samper, expresó hoy su satisfacción “ante el esclarecimiento del asesinato del diputado Robert Serra en Venezuela”, informó ese organismo en un comunicado.
El también expresidente de Colombia (1994-1998) agradeció una declaración del presidente venezolano, Nicolás Maduro, sobre la intervención de Unasur en el esclarecimiento del caso.
La nota recuerda que el secretario general del organismo había sugerido que existen elementos de juicio importantes que deberían llevar la investigación hasta las últimas consecuencias para aclarar lo ocurrido.
“Asesinato del joven diputado Robert Serra en Venezuela es una preocupante señal de infiltración del paramilitarismo colombiano”, escribió Samper el 2 de octubre en su cuenta de Twitter, sin ahondar en el tema.
Maduro, según publicaron medios de comunicación, agradeció la advertencia de Samper en el sentido de que el asesinato del diputado venezolano Robert Serra fue una señal de la infiltración del paramilitarismo colombiano.
Al respecto, el presidente venezolano acusó al expresidente de Colombia Álvaro Uribe Vélez y a “criminales” protegidos por el Gobierno de EE.UU. de la autoría “intelectual” de la muerte de Serra y dijo que las informaciones que maneja “apuntan hacia Colombia y la banda de criminales que ha dirigido toda la vida el expresidente Álvaro Uribe”.
Samper remarcó hoy que como secretario general de la Unasur tiene la responsabilidad de expresar su preocupación “sobre todo hecho que pueda afectar o comprometer la estabilidad o gobernabilidad democrática de los países que forman parte de la región”.
Las autoridades venezolanas han emitido siete órdenes de captura contra presuntos implicados en el caso del asesinato del diputado chavista y de su asistente María Herrera y la Interpol busca a dos de ellos con código rojo, dijo la fiscal general de Venezuela, Luisa Ortega, quien recordó que dos personas han sido detenidas.
Serra y Herrera fueron asesinados el 1 de octubre en la residencia del diputado en el oeste de Caracas, en un hecho perpetrado con armas blancas que las autoridades venezolanas atribuyen a un crimen político planificado desde hace meses.