Venezuela, el país con las mayores reservar probadas de petróleo del mundo -certificadas en 297 millones de barriles-, recurrió por primera vez en su historia a la importación de crudo.
En la última semana el miembro fundador de la Opep (Organización de Países Exportadores de Petróleo) compró en el exterior un total de cuatro millones de barriles de hidrocarburos livianos.
Aunque Petróleos de Venezuela (PDVSA) aún no ofrece detalles sobre las operaciones, responden a la necesidad de contar con crudos livianos para diluir el pesado producto que se obtiene de la Faja del Orinoco.
Se espera que el primer cargamento, proveniente de Argelia, llegue al puerto del Complejo José Antonio Anzoátegui (en Anzoátegui) el próximo 26 de octubre, para ser mezclado con el hidrocarburo de la Faja.
La segunda importación consiste en otros dos millones de barriles de petróleo ruso, comprado a la asiática Petrochina, que arribará a inicios de noviembre a la refinería Isla, operada por PDVSA en Curazao.
Las causas
José Toro Hardy, experto energético y exdirectivo de la industria estatal, considera que “las importaciones de petróleo revelan la gravedad de la situación de PDVSA”.
Explica que la empresa no tiene capacidad para diluir el pesado crudo de la Faja debido a que los mejoradores no funcionan a plena capacidad por la falta de mantenimiento.
Ante las limitaciones de las plantas mejoradoras, la estatal optó por mezclar el producto de la franja del Orinoco con otros más livianos o nafta, que en este momento no se producen en el país, publica La Verdad.
El nafta, un derivado de petróleo que se obtiene en los procesos de refinación, se dejó de elaborar en Venezuela debido a las condiciones del parque refinador, agregó Toro Hardy.
Los crudos livianos y medianos que se extraen de zonas como Zulia y Monagas son cada vez menores por la sobreexplotación de los yacimientos, las expropiaciones de empresas de servicio y la falta de inversiones.
Ante la situación, PDVSA tuvo que recurrir en su momento a la importación de nafta y ahora a la de petróleo para mezclar el producto de la Faja, en la que se concentró la atención en los últimos años.
Mala gestión
Las compras de hidrocarburo en el exterior revelan “la necesidad de mejorar la gestión” de Petróleos de Venezuela, la principal empresa de la nación, afirma el economista Gustavo Machado.
“Lo más lógico y rentable es que nosotros mismos produzcamos el crudo liviano que hace falta para mezclar con el extrapesado”, explica el profesor de la Universidad del Zulia.
Agrega que la importación de petróleo incrementa los costos de producción de PDVSA, lo que implica una disminución de los ingresos y una reducción de sus aportes fiscales al Estado.