Antonio Maria Delgado
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@DelgadoAntonioM
Una serie de expresiones públicas lanzadas recientemente por altos funcionarios del chavismo dejan entrever la posibilidad de que el régimen intervenga las operaciones del fabricante de la reconocida marca, que abastece cerca de la mitad de la harina utilizada para hacer arepas en Venezuela, dijeron analistas.
“La intención es explotar la marca Polar en sus centros de distribución, porque ellos [el régimen] lo que están suministrando es de malísima calidad y quieren terminar de controlar el alimento de los venezolanos”, agregó.
Además de Harina P.A.N., Empresas Polar produce varias docenas de otras marcas, desde cerveza y salsa de tomate hasta atún y avena, además contar con la concesión de la marca Pepsi Cola.
Pero el gobierno no estaría interesado en asumir la producción de la empresa de alimentos, sabiendo muy bien que las expropiaciones que el régimen realizó de las otras productoras de harina de maíz condujeron en pocos meses a la virtual desaparición de sus productos en los anaqueles del país.
“Ellos quieren que Polar siga produciendo, pero quieren ser los encargados de la distribución. Quieren tener el control, para distribuir el hambre”, agregó Gerbasi.
Según un funcionario del gobierno citado por el periodista Nelson Bocaranda en el sitio de noticias Runrun.es, la intervención de las operaciones de Polar podría ser anunciada el viernes como parte del nuevo paquete de medidas económicas que Maduro prepara para el Día del Trabajo, como una nueva manera de encarar la crisis de escasez que sufre el país.
“El objetivo es el control total de la distribución de los productos de la Polar a través de la intervención de sus centros de distribución para luego poder hacer grandes redireccionamientos hacia los canales que el gobierno decida”, dijo la fuente, cuya identidad no fue revelada por Bocaranda.
“Así, todo los productos que Alimentos Polar distribuye hoy día a las 20,000 bodegas podrán mandarlos a PDVAL, Bicentenario [negocios operados por el chavismo] y los supermercados privados”, agregó.
El régimen, que por años ha ejercido presión sobre empresas Polar, en el pasado ha amenazado con expropiar a la compañía, argumentando que su dueño, el magnate Lorenzo Mendoza, ha financiado a la oposición.
Pero las acusaciones alcanzaron un punto álgido esta semana luego de que el presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, acusara a la empresa de emprender “un plan de guerra” contra el gobierno venezolano involucrando a la entidad militar privada estadounidense, Blackwater.
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