De acuerdo al informe que dio este viernes, el Fondo Monetario Internacional (FMI) estima un panorama económico muy crítico para Venezuela, “los precios siguen trepando fuera de control, y prevemos que la inflación aumente a 720 por ciento para este año, después de alcanzar una tasa récord mundial en torno a 275 por ciento en 2015″.
Asimismo, señala que en Venezuela, las distorsiones de política económica y desequilibrios fiscales ya habían generado un escenario de inestabilidad, problemas que “se agravaron cuando el descenso de los precios del petróleo desencadenó una crisis económica, con una caída del producto estimada en casi 18 por ciento durante 2015 y 2016”.
El crecimiento de América Latina se mantendrá a “paso lento durante un período prolongado”, debido a retos políticos y macroeconómicos en varios países de la región, afirmó este viernes el economista jefe del Fondo Monetario Internacional (FMI) para América Latina, Alejandro Werner.
En su actualización de las previsiones dentro de su Informe de “Perspectivas Económicas Regionales”, el Fondo pronosticó una contracción de Argentina en 2016 del 1 %, comparada con la del 0,7 % de hace tres meses; del 8 % para Venezuela (6 % en octubre pasado), y Ecuador, que entrará también en terreno negativo, aunque de manera más leve, tras las previsiones anteriores de apenas un 0,1 % positivo.
Las principales preocupaciones del FMI se concentran fundamentalmente en dos economías sudamericanas: Brasil, un gigante que cerró 2015 en retroceso de 3,8% y caerá 3,5% en 2016, y Venezuela, que sufrió una caída de 10% el año pasado y en 2016 tendrá una recesión que el FMI estimó en 8%.
Estos dos países sufrieron fuerte impacto de escenarios globales: la caída de los precios de las commodities, para Brasil, y el desplome generalizado en los precios del petróleo, para Venezuela. Pero los dos tienen problemas internos que atender.
El resto de América Latina
“En general, para el mediano plazo se prevé que el crecimiento se mantenga débil, lo cual subraya la importancia de resolver los retos internos”, afirmó el experto. El FMI estimó el martes que la región cerrará el año 2016 en retroceso de 0,3%, en recesión por segundo año consecutivo.
“En un contexto mundial que, según se proyecta, seguirá débil, prevemos que la región crezca a paso lento durante un período prolongado”, dijo Werner.
En un documento de cinco páginas, Werner destacó que este escenario de dos años seguidos de recesión ocurre por primera vez “desde la crisis de la deuda de 1982–83, que desencadenó la ‘década perdida’ para la región”.
“La región sigue siendo particularmente vulnerable a una desaceleración mayor que la prevista en China —uno de los más importantes socios comercial para la región—y a nuevas caídas de los precios de las materias primas”, señaló el documento.
En el caso de Brasil, el FMI identificó una combinación de “fragilidades macroeconómicas”, un escándalo que envuelve a empresarios y funcionarios, y problemas de índole típicamente política.
En tanto, Colombia, México, Perú y Chile se incluyen entre los que han hecho buena letra en 2015 y deberán mantenerse en esa tendencia en 2016.
Con información de Agencias (EFE/AFP/Reuters)