Robert Carmona-Borjas: Venezolanos en el Exterior y el Ejercicio de la Democracia Representativa

Robert Carmona-Borjas: Venezolanos en el Exterior y el Ejercicio de la Democracia Representativa

thumbnailRobertCarmonaBorjasLa gravísima crisis política y económica que atraviesa hoy el país ha obligado en los últimos años a cientos de miles de venezolanos a emigrar, con las consecuencias que significa para un país la pérdida de lo más importante: su capital humano. La emigración masiva de venezolanos se ha producido paradójicamente, como lo bien señala Tomás Páez en su excelente obra “La Voz de la Diáspora Venezolana”, en el momento de mayor bonanza económica de la historia republicana del país, con ingresos que en tan solo quince años superan cuatro veces los percibidos por el país durante los 40 años de democracia.

Las condiciones de vida en el país cambiaron radicalmente desde 1998 cuando se consolida en el poder un grupo de militares y de civiles frustrados que antes, el 4 de febrero de 1992, había intentado derrocar por las armas al gobierno democrático de Carlos Andrés Pérez. La miseria, la inseguridad, la violación de los derechos humanos en general, la discriminación o apartheid político y la intolerancia, pero sobre todo la imposibilidad de un futuro seguro han sido algunas de las razones que han hecho que tantos hombres y mujeres, la mayoría jóvenes y profesionales, hayan tomado la decisión de emigrar.

El venezolano no deja el país, como lo ha demostrado durante este tiempo. Tampoco el país los deja a ellos, pues en alguna medida y pese a las dificultades y las políticas excluyentes del régimen chavista en el poder desde 1999, nunca se ha separado de la realidad nacional. Los venezolanos en el exterior se han agrupado, se han organizado, han creado Asociaciones en todas partes que funcionan y que han servido como foros para la reflexión y el debate sobre los problemas nacionales.





Aunque, es cierto, pueden participar en elecciones presidenciales y en otros actos electorales de trascendencia nacional, los venezolanos en el exterior no tienen sin embargo una representación en la Asamblea Nacional, como lo tienen otros países cuyas poblaciones nacionales en el extranjero son de igual importancia, como sería el caso de Italia. Poder elegir sus representantes en la Asamblea Nacional perfecciona el ejercicio por todos los venezolanos de la democracia participativa en la que se basa el sistema político venezolano.

Lograr la representación de los venezolanos en el exterior en la Asamblea Nacional es un proyecto novedoso y ambicioso que se ajusta a los nuevos tiempos y que supone esfuerzos diversos. En primer lugar, una mayor organización de la comunidad venezolana en el exterior, a través de la creación de una Federación de las Asociaciones existentes. En segundo lugar, la creación de una Oficina Pública a nivel nacional que asegure el funcionamiento de esa estructura organizacional y el disfrute de los derechos humanos de los venezolanos en el exterior, no solamente en relación con las instituciones venezolanas, sino ante el Estado receptor o de acogida.

Los venezolanos en el exterior requieren la protección efectiva de sus derechos, hoy vulnerados por las arbitrariedades y los abusos de un régimen que instrumenta, mediante un sistema consular politizado, una discriminación sin precedentes por razones ideológicas y políticas. Un proyecto de esta naturaleza supone una reforma legal que contemple tal derecho y, a la vez, una modificación del sistema electoral, con la creación de una circunscripción electoral particular constituida por electores nacionales radicados en el exterior.

Es el momento de organizarse y de exigir nuestros derechos como ciudadanos, para lo cual debería hacerse una amplia consulta a la comunidad de nacionales en el extranjero con el fin de elaborar y presentar a la Asamblea Nacional un Proyecto de Ley o de un Decreto legislativo que permita que los cientos de miles de venezolanos en el exterior tengan una representación en la Asamblea Nacional y que puedan ejercer su derecho a la democracia participativa, contemplado en nuestra Constitución Nacional, y a la vez asegurarse de la protección del Estado ante sus mismas instituciones y las de los Estados que los reciben.

 

@CarmonaBorjas

Robert Carmona-Borjas, Escritor y Abogado Venezolano, Experto en Asuntos Militares y Seguridad Nacional. En el exilio desde el año 2002. Reside en la ciudad de Washington, DC. Autor de varios libros, entre ellos: “Cuba, Asedios, Utopías y Otros Bloqueos” y “Más Allá de la Génesis del 11 de Abril”