El deterioro de los trenes de producción de la planta Orinoco Iron ubicada en el estado Bolívar, principal fabricante de briquetas a nivel nacional, hace que de tres trenes solo funcione uno, cuya productividad está garantizada solo por los próximos quince días. Así lo informó Orangel Palma, dirigente nacional del Movimiento Sindical de Base (Mosbase) y del Movimiento Once.
Nota de prensa
Palma señaló que la paralización de dos de los tres trenes obedece a la desinversión en mejoras para la planta y que, aunque los repuestos que se requieren para que la maquinaria retome funcionamiento se encuentran en el país, la deuda que mantiene la empresa con los proveedores hace que sea inviable la compra.
“Se necesitan dos mil millones de dólares solo para sanear el área de instrumentación, para el área de producción se requiere más y el dinero está, porque se vendieron 630 mil toneladas de productos y no sabemos dónde está el dinero si la empresa no paga a proveedores ni cancela beneficios laborales” indicó.
A la situación se le suma la falta de mano de obra. Palma detalló que unos 250 trabajadores cesaron funciones en Orinoco Iron, doscientos de los cuales están a la espera del pago de sus prestaciones sociales. Esta situación implica un déficit de personal técnico, el cual migró por las condiciones laborales, bajos sueldos y merma en beneficios laborales, además del incumplimiento de la Contratación Colectiva.
Denunció que, además de la situación interna, la directiva de la planta y los sindicatos usan a los trabajadores como factores políticos, los obligan a ir a manifestaciones y marchas bajo promesas de pagos que no se concretan.
Aumento empobrecedor
Orangel Palma se refirió al aumento salarial del 50% decretado por el presidente Nicolás Maduro y señaló que se trata de un aumento empobrecedor, que solo generará deudas a los trabajadores y no tendrá gran incidencia en utilidades, prestaciones sociales y otros beneficios de ley. Señaló que este incremento se da sin que Orinoco Iron cancelara el aumento de 30% decretado en mayo pasado.
Explicó que la mayor parte del incremento se da en el bono de alimentación, lo que impide que esto tenga incidencia en los beneficios de ley y hace que los trabajadores laboren solo para comer. “Esto quiere decir que el Gobierno solo paga la comida, estamos peor que en la época de los romanos, quienes trabajaban por un salario y la alimentación era aparte” dijo.