La Organizaciòn de Estados Americanos, a través de su secretario general, Luis Almagro se solidarizó con el pueblo de Venezuela luego de los acontecimientos de las últimas 48 horas que dejaron cuatro fallecidos e incalculables pérdidas materiales debido al “contragolpe monetario” del presidente Nicolás Maduro.
En la misiva la Secretaría General llama al restablecimiento de institucionalidad.
A continuación el comunicado completo
19 de diciembre de 2016
La Secretaría General de la Organización de los Estados Americanos (OEA) expresa su solidaridad y voluntad incondicional de apoyo al pueblo de Venezuela en relación a la reciente ola de violencia, saqueos y desesperación motivada por las medidas monetarias adoptadas por el gobierno, que restringen la circulación de efectivo y como corolario impiden cubrir las más básicas necesidades.
Al mismo tiempo, la Secretaría General hace un llamado a la calma y al restablecimiento de la convivencia ciudadana. La situación ha generado desórdenes públicos serios en por lo menos 12 estados, con reportes de manifestaciones, disturbios y/o saqueos en 27 ciudades.
A esto se le suma la alarmante y continua situación de privación de derechos civiles y políticos, de ruptura institucional y de crisis social y humanitaria.
El crítico panorama ha desembocado en una ola de disturbios que han conducido al aumento de la ya descontrolada inseguridad en el país y que, según informan los medios locales, habría producido la lamentable muerte de un niño de 15 años durante los saqueos en el bulevar La Limonada en el Callao.
En línea con lo expresado anteriormente en diversas oportunidades, la Secretaría General de la OEA exhorta al Gobierno venezolano al cumplimiento de sus obligaciones y a utilizar todos los medios necesarios para restablecer la institucionalidad en el país y atender las urgentes necesidades de la gente, al tiempo de recuperar la paz ciudadana.
Tal como está establecido en los pactos internacionales de derechos humanos, es responsabilidad del Estado asegurar el derecho a la vida, seguridad, los derechos sociales y económicos, así como las necesidades básicas de sus habitantes.
Del mismo modo, es responsabilidad directa de los gobernantes asegurar la restitución de los derechos políticos y del derecho a elegir y ser elegido por parte de la ciudadanía.
En este contexto de degradación política, económica y social, la Secretaría General de la OEA hace un llamado a los responsables y partes en el diálogo que se lleva a cabo en el país a tomar en cuenta en forma urgente la severa realidad humanitaria que vive el pueblo venezolano.
Ningún pueblo puede depositar esperanzas en un intento de diálogo que no implique acuerdos concretos y su cumplimiento irrestricto de buena fe, así como la ciudadanía no puede creer en un diálogo que resulte ajeno y distante a sus intereses reales y tan ineficiente, ya que durante tantos meses no ha podido resolver los problemas básicos del pueblo venezolano.
La Secretaría General de la OEA insta en forma urgente al Gobierno de Venezuela y a los integrantes y facilitadores de las mesas de diálogo a alcanzar, con la premura que la situación amerita, los acuerdos efectivos que brinden soluciones en Venezuela y que implican:
.- apertura sin dilaciones de canal humanitario
.- soluciones para el pueblo en materia de alimentos y medicinas
.- restitución expedita del derecho de votar y de elegir del pueblo, conforme la gente esperaba una solución de carácter pacífico por esta vía.
.- cese de la represión y la violencia contra la gente
.- liberación de todos los presos políticos
.- recuperación de la debida independencia de poderes, incluyendo restitución de poderes la Asamblea Nacional, un nuevo Tribunal Supremo de Justicia y un nuevo Consejo Nacional Electoral
.- restablecimiento de la paz social,
regreso a la normalidad institucional y democrática del país
.- rendición de cuentas por partes de los gobernantes respecto a su responsabilidad política y judicial.
La Secretaría General de la OEA reitera su indeclinable vocación de cooperación y de apoyo al pueblo de Venezuela en la presente situación y redobla su oferta de colaboración para restablecer la normalidad institucional, política, democrática y en materia de derechos civiles y humanitarios en Venezuela.