Más de diez años tenían los vecinos de la calle Las Palmas, de Las Minas de Baruta, conviviendo entre basura, roedores, moscas y malos olores, debido a un vertedero improvisado, al que con ayuda de la Alcaldía de Baruta, organización, creatividad y voluntad lograron ponerle fin a este problema.
La falta de conciencia de los habitantes de la zona, hizo que se acostumbraran a botar la desperdicios diariamente en esta concurrida esquina, sin tomar en cuenta el servicio de recolección de desechos sólidos pautados todas las noches entre 8:00pm y 12:00am. Sin embargo un grupo de vecinos preocupados por los problemas de higiene y salud a los que estaban expuestos, decidió tomar acciones, para lograr una solución. En pocos meses -con el apoyo del Consejo Comunal del lugar y la Alcaldía de Baruta – organizaron mesas de trabajo y en conjunto limpiaron el espacio. en el que colocaron un ingenioso pesebre.
Juan Andrade habitante de la localidad señaló que lo más difícil fue hacerle entender a la gente que ese lugar ya no era un botadero de residuos, “la inquietud de muchos era saber dónde colocarlos, pero gracias a la orientación de la dirección de Áreas Verdes de la alcaldía, quienes nos detallaron las rutas y los horarios de recolección, pudimos instruir a la comunidad en cuanto a al lugar y el momento idóneo para sacar la basura” señaló.
Para Maribel Sanz, miembro del Consejo Comunal Urquia, que reúne las familias que viven en las calles Las Palmas, La Pedrera y la parte baja del Colegio Americano, esto es un logro, “con este trabajo demostramos que organizados podemos solucionar los problemas de nuestra comunidad, no fue fácil, pero con el apoyo de las autoridades municipales y la buena voluntad vecinal lo conseguimos, ahora en lugar de una montaña de suciedad, podemos ver a los niños jugando en un espacio limpio, incluso algunos hasta se toman fotos con el nacimiento”.
Aunque aun estos vecinos tienen camino por recorrer, ya adelantan acciones como: organizar guardias para vigilar el lugar constantemente y así evitar que algunas personas mal intencionadas intenten seguir arrojando despojos en el sitio. Para finalizar y como otro punto positivo que se desprende de esta iniciativa, han compartido la experiencia con habitantes de sectores aledaños que sufren el mismo problema para que apoyados en las autoridades de la Alcaldía puedan poner en práctica estas acciones y mejorar su estilo de vida.