El hecho ocurrió el 20 de noviembre de 2012 en la sede del referido centro de salud, el cual se encuentra ubicado en la avenida principal de Las Mercedes, municipio Baruta del estado Miranda.
Los fiscales 59° nacional y auxiliar, junto al 61º auxiliar del Área Metropolitana de Caracas (AMC), Marisol Zacaría, Luis Jiménez y Serbio Hernández, respectivamente, acusaron al anestesiólogo y al médico cirujano por presuntamente incurrir en el delito de homicidio intencional a título de dolo eventual, previsto y sancionado en el Código Penal.
En el escrito presentado ante el Tribunal 48° de Control del AMC, los representantes del Ministerio Público solicitaron la admisión de la acusación, el enjuiciamiento de los galenos y que se mantengan las medidas cautelares a los médicos, consistentes en arresto domiciliario, prohibición de ejercicio de la medicina y de salida del país.
De acuerdo con la investigación, antes de iniciar la intervención quirúrgica, a Sánchez Higuera le habrían aplicado una dosis de anestesia que le produjo de inmediato un paro respiratorio, posteriormente un edema cerebral y, finalmente, la muerte.
De igual forma, también se determinó que la Clínica San Felipe no tiene una unidad de cuidados intensivos en caso de que un paciente se encuentre en estado crítico como consecuencia de las intervenciones y, además, no posee servicio de ambulancia.
Igualmente, se determinó que el quirófano no cumple con las condiciones adecuadas para realizar ningún tipo de operación, lo cual fue certificado por Contraloría Sanitaria del Ministerio del Poder Popular para la Salud.
El mismo día, los dos galenos fueron aprehendidos por funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas y puestos a la orden del Ministerio Publico.
Cabe destacar que el centro médico fue clausurado.