Las personas, según su signo del zodíaco, matan de una u otra manera. El escritor español, Ismael Gil, recaba tres casos reales de asesinatos por cada signo zodiacal. Los 36 crímenes están recogidos en el libro “12 formas de matar, los asesinos según su signo del zodíaco”.
Aries es un asesino rápido, Géminis el más profesional, Tauro mata por celos, Acuario para defender lo suyo, y es muy probable que un asesino en serie sea un signo de aire.
La forma de matar de un Aries es rápida y contundente. El asesino suele improvisar, no toma precauciones y jamás se arrepiente. No elimina pruebas y ataca a la cabeza. Las razones que le llevan a cometer el crimen son la ofuscación, un arrebato o el deseo de defender algo. El arma blanca y de fuego son las armas que más
utiliza.
Ismael Gil ilustra el signo Aries con un asesino múltiple. El crimen aconteció el 27 de noviembre de 1996 cuando Juan Medina, de 53 años, en paro y divorciado, mata con una escopeta de caza a Carmen Delgado, de 22, debido a la negativa de ésta de acceder a sus pretensiones sentimentales. Mató también a los hermanos de Carmen, Antonio y Rosa, de 19 y 15 años. Después mató a la abuela y a la madre de los chicos.
Posteriormente abate a tiros a la hermana de su ex mujer. El cerco de la policía impidió que rematase la faena asesinando al padre de su pretendida. Se suicidó en el interior de su vivienda, disparándose un tiro en el pecho.
Juan Medina era el típico Aries primario y tosco. De carácter marcadamente agresivo, dominante y autoritario, no dudó en imponer su voluntad contra todo aquello que se le interpuso.
Tauro: el asesino del método.
Antes de cometer un crimen, un sujeto Tauro calcula y premedita lo que desea hacer. No es impulsivo y suele ensañarse con la víctima. Ataca por la espalda y tomando las máximas precauciones. Le gusta volver al lugar del crimen. Mata por fijaciones obsesivas, por cuestiones de dinero o propiedades. El método que utiliza es la estrangulación y armas de fuego largas.
Uno de los tres casos reales que recoge Gil en el libro es el de Cándido Márquez. El 3 de enero de 1995, en un pequeño pueblo de España el hombre irrumpe, vestido de “Rambo”, en distintos bares de la zona. Disparó contra todo lo que tenía delante, hiriendo a algún cliente. Más tarde, se cruza con su vecino y le pega un tiro en la cabeza cuando éste se encontraba de espaldas. Intentó quitarse la vida pero la policía le detuvo en una localidad cercana.
Según el astrólogo Ismael Gil, Márquez acusaba un grave trastorno psicótico. Lo que explica que antes de iniciar su acción se cambiase de ropa. Indica una pérdida de contacto con la realidad y pretendía desinhibirse escopeta en mano.
El astrólogo Ismael Gil nos explica más profundamente la relación de los signos y los asesinos.
— Un informe psiquiátrico puede eximir de culpa en un juicio, no ocurre lo mismo con la carta astral de un presunto asesino, ¿verdad?
— No, porque la astrología no es una disciplina reconocida en muchos países. Los informes que se emitieran no estarían considerados desde un punto de vista ortodoxo. Sin embargo, en Estados Unidos sí se ha implantado la astrología como carrera universitaria. En España también es carrera desde este año.
— ¿Cuál es el rasgo característico de agresividad de cada signo que le puede llevar a matar?
— La agresividad es una y es consustancial al ser humano. Todo el mundo tiene un grado de agresividad que no es lo mismo que un grado de agresión. No todo el mundo mata por las mismas causas. Hay que conocer el carácter de un individuo, y en este sentido la astrología ayuda a conocerlo más y poder ver sus posibles motivaciones.
— ¿El hombre de a pie en qué se diferencia del asesino?
— Es que los asesinos, hombres y mujeres, son hombres de la calle. Si nos fijamos, cuando vemos imágenes en la televisión de los vecinos del que se ha destapado como asesino, todos dicen lo mismo: “¿Quién lo iba a decir?, era un buen padre de familia, un tipo amable, muy buen persona”, etc. En realidad no sabemos como somos. Si no nos conocemos ni a nosotros mismos, cómo vamos a conocer al vecino. Por eso es muy difícil saber cuándo un individuo es agresivo o agresor. A no ser que se esté en una situación límite que nos exija actuar sin tiempo para pensar. Entonces podemos ver cómo es cada uno. En una situación límite se puede actuar según una química personal que es la que está retratada en la carta astral.
Documento astrológico.
— ¿Si lee un caso con todos los rasgos de la personalidad del asesino (sin saber su signo), podría intuir de qué signo es?
— Sin ver la carta astral, viendo el tipo de acción se pueden saber muchos datos, incluso más importantes que el propio signo. La carta es un conjunto de factores, signo, ascendente, planeta dominante, etc. En el libro lo resumo como el “D.N.I astrológico” que es la posición de tu sol, de tu ascendente, tu temperamento y tu planeta dominante. En el mundo de la astrología se distingue entre individualidad, personalidad y temperamento. Viendo cómo ha sido la acción de una persona podemos actuar a la inversa. Es decir, deducir qué patrones de edad, por ejemplo, puede tener el individuo en cuestión.
— ¿El arma utilizada varía de uno a otro asesino con zodiaco diferente?
— Yo cito las preferentes. Sin embargo, hay que tener en cuenta que hay signos que improvisan y matan con lo primero que tengan a mano. En Estados Unidos hay más asesinatos con pistola porque están al alcance de todo el mundo. Por ejemplo, un Aries mata de cara, no te da por la espalda. El riesgo para él no tiene importancia. Una persona que evalúe el peligro pegará un tiro a distancia. El carácter del signo también predetermina tu acción final.
— ¿El signo puede predecir un comportamiento agresivo violento? ¿Se podría experimentar en una cárcel qué clase de asesinato cometerían los presos una vez puestos en libertad?
— Sí se puede experimentar. Tengo compañeros que han dado clase de astrología en la cárcel. En prisión hay gente que ya está juzgada. En el libro todos los casos son de gente que está juzgada y sentenciada. Siempre hay unos patrones comunes en cuanto a agresividad. Si no se tiene una tendencia muy agresiva es muy difícil que cometas un crimen.
Esto viene muy explicado en la carta, incluso la motivación que te lleva a asesinar. Pueden ser los celos, razones económicas, por ofuscación, por aburrimiento.
— “12 formas de matar” es un estudio a posteriori. ¿De dónde viene su interés por estudiar a asesinos y sus signos?
— Es un libro que pretende ser divulgativo, que todo el mundo lo entienda sin tener conocimientos amplios de astrología. Por una cuestión de formato he elegido tres casos para los doce signos del zodíaco. El tema tenía que ser innovador. Los casos tenían que estar lógicamente sentenciados y ser recientes. Lo que me interesa son las conductas que se salen de la norma. Me gusta estudiar las psicopatologías y la medicina en particular.
— ¿No le parece un poco morboso analizar algo que no se podría haber evitado con el conocimiento de los signos?
— Hay muchas cosas que se estudian que no sólo no se pueden evitar sino que además no tienen ninguna aplicación. Por eso para mí, cualquier campo que esté conectado a la conducta humana es interesante.
— ¿En su opinión la carta astral debería tenerse en cuenta a la hora de rebajar una pena?
— No creo que debiera tenerse en cuenta. En este sentido, la astrología es un conocimiento milenario que por circunstancias sociales no está aceptado ahora, pero que nos puede aportar mucho saber en cualquier nivel. Que no se utilice resulta, en cierto punto, negligente. En el caso concreto de Rosa Guardia (de signo Acuario, esta mujer mató a su marido a cuchilladas y lo emparedó en una habitación de la casa, el cadáver permaneció escondido más de un año), apunto en el libro que mató a su marido no por ser una asesina, sino para defender tanto su vida como la de sus hijos. El concepto de matar es inherente a la propia vida, es el instinto de supervivencia. Esta mujer, sin el estímulo de un marido agresor, no hubiese necesitado matar a nadie. En el juicio este aspecto estuvo muy bien considerado y no hizo falta la carta astral. Podría haber sido un informe añadido.
Asesinato a priori.
— En el caso de esta parricida Acuario, la que comete el crimen es ella, pero el marido la había sometido a malos tratos físicos y psicológicos, ¿cómo se explica esto?
— Efectivamente. Yo siempre digo lo mismo. Cuando un individuo tira a su pareja por la ventana ya no hay más que hablar. Conocemos el final de la película. Pero si conociésemos el principio, efectos y causas se unirían. No quiero con esto justificar una mala acción, sino analizar.
La vida de una persona es muy compleja, así que la vida de una pareja es doblemente compleja. Este tema lo trataré en mi próximo tema, las doce formas de amar, y de las relaciones entre parejas. La astrología nos puede dar un punto de vista objetivo y aséptico. El astrólogo no necesita tener un intercambio visual o físico con la persona, a diferencia del psicólogo.
— ¿Importan más la presión familiar, social o mental que ser de un signo particular a la hora de cometer un crimen, o va todo unido?
— Va unido. Como decía Oscar Wilde “los que distinguen entre alma y cuerpo es que no tienen ninguna de las dos cosas”.
— ¿Es posible que los asesinos en serie sean del mismo signo?
— No es que sean necesariamente del mismo signo pero tienen patrones muy parecidos. La mayoría de los asesinos en serie son geminianos o lunares. Un individuo que para conseguir un propósito es capaz de andar de un lugar para otro no es estático. Difícilmente un Tauro puede ser un asesino sistemático. Serán signos de aire: Géminis, Libra, Acuario…
— ¿Un sufrimiento físico o psicológico rige más nuestra conducta que un planeta?
— La astrología no dice que los planetas o el cielo te condicione. El cielo sólo refleja cómo es un individuo. Un individuo tiene una predisposición a padecer conflictos psicológicos porque los aprendió en su infancia. Dos factores predeterminan a una persona, su físico y la familia. Debemos aprender a jugar con ambos. La astrología puede ser la linterna que nos ayude a guiarnos pero el camino lo tenemos que hacer nosotros.
— Tras su estudio de casos reales, ¿Cuál es el signo más agresivo, el más frío y calculador, el que más sufre con el arrepentimiento, el que más disfruta haciendo daño?
— El concepto de arrepentimiento no lo tienen todos los signos. Está conectado a los signos de agua que son más emocionales. Sería el caso de quien mata a su esposa, luego se da cuenta de lo que ha hecho y se suicida. Los más fríos y calculadores son los signos de aire porque el aire no es emocional. Por eso los mejores asesinos son los Géminis, los más profesionales desde el punto de vista técnico.
— Por último, ¿cuál es el signo más asesino en la historia?
— No lo hay. Como está claro que no todos matan por las mismas causas, todo el mundo puede llegar a asesinar.