Las principales autopistas de Israel han tenido hoy que ser cerradas al tráfico por el peor temporal de lluvia y fuertes vientos registrado en el país desde hace al menos diez años, que ha causado numerosas inundaciones y el desbordamiento de ríos habitualmente secos.
El temporal, que comenzó el pasado domingo, se espera que continúe e incluso empeore hasta el próximo jueves.
Las inundaciones de varias calles paralizaron hoy el tráfico rodado en Tel Aviv y sus alrededores, provocando enormes atascos, mientras que la principal autopista del país, que conecta la mayor urbe israelí con Jerusalén, tuvo que ser cortada en ambas direcciones.
La mayoría de las autopistas israelíes han sido cortadas o presentan serios problemas a la circulación debido a las inundaciones de la calzada.
El caudal del río Ayalon, cerca de Tel Aviv, habitualmente un cauce sin agua, aumentó por encima de su capacidad y se encuentra al borde del desbordamiento después de que el temporal alcanzase la pasada noche el centro de Israel.
La Policía israelí ha pedido a los conductores que no circulen por el centro del país y que eviten en lo posible usar el automóvil.
Las cuatro estaciones de tren de Tel Aviv han sido cerradas, así como el tren ligero que conecta los suburbios de la ciudad.
Se han registrado cortes de electricidad en varias ciudades de la zona metropolitana del Gran Tel Aviv, debido a la caída de postes eléctricos provocada por los fuertes vientos, que han alcanzado velocidades superiores a los cien kilómetros por hora.
El alcalde de Tel Aviv, Ron Huldai, dijo que la urbe está preparada para evacuar a residentes si es preciso y que se han abierto los centros comunitarios en el norte y el sur de la ciudad para ofrecer refugio en caso necesario.
El nivel del lago Tiberiades (o mar de Galilea) ha subido 22 centímetros desde el domingo, el mayor incremento de los últimos diez años, mientras que los depósitos de agua en los Altos del Golán han sobrepasado el límite de su capacidad.
Tres personas resultaron muertas esta mañana en un accidente de circulación en la autopista número 1, que conecta Tel Aviv con Jerusalén, antes de que ésta fuese cerrada, aunque se desconoce por el momento si la causa del siniestro fue debida al temporal.
Las predicciones meteorológicas apuntan a que las fuertes lluvias y vientos continuarán en todo el país hasta el próximo jueves, así como a un descenso de las temperaturas que podría provocar nevadas en Jerusalén y otras zonas.
EFE