En los inicios de la fotografía, la tecnología no se había perfeccionado lo suficiente y las fotos necesitaban un tiempo de exposición enorme. En 1826, Joseph-Nicéphore Niépce tardó entre 8 y 10 horas en capturar lo que actualmente se conoce como la primera fotografía de la historia. Es por esto que en sus inicios la técnica de la fotografía no se empleó para hacer retratos de personas debido a que con esos largos tiempos de exposición era prácticamente imposible mantener a una persona quieta para su captura.
La primera fotografía de una persona se tomó en 1838 (aunque existen discrepancias en cuanto a esta fecha y algunos estudios del tema la ubican en 1839), y fue realizada por Louis Daguerre en el Boulevard du Temple en París.
En la primer foto de un ser humano se puede observar un hombre levantando una pierna mientras le limpian las botas. Lo curioso del tema es que la calle era muy transitada y en ese mismo instante por esa avenida circulaban varias personas y carruajes. Sin embargo, la gente pasaba demasiado rápido como para poder aparecer en la imagen. Excepto nuestro misterioso personaje que se quedó quieto el tiempo suficiente como para impresionar la fotografía para los 10 minutos de exposición que Louis había configurado. / Contexto