Una trabajadora de limpieza robó el martes un tren de pasajeros que se encontraba vacío en una estación, y lo condujo hasta un suburbio de Estocolmo, donde descarriló y se estrelló contra un inmueble de apartamentos, informaron las autoridades.
La mujer sufrió lesiones graves durante la colisión, ocurrida por la madrugada, y se le trasladó por aire hasta un hospital en Estocolmo, dijo el vocero policial Lars Bystrom. Nadie más resultó herido.
Bystrom dijo que la mujer está detenida, como sospechosa de poner en peligro la seguridad pública.
Tomas Hedenius, vocero de la empresa operadora ferroviaria Arriva, dijo que la mujer, nacida en 1990, robó el tren de cuatro vagones en una estación ubicada en las inmediaciones de la capital.
Luego, la joven operó el tren, que se desplazó más de kilómetro y medio (una milla) hasta la estación terminal de la línea, donde saltó fuera de las vías, avanzó unos 25 metros (30 yardas) y se estrelló contra el edificio de tres pisos.
Varias fotografías del lugar muestran que la locomotora penetró por un muro del inmueble.
“Había tres familias dentro del edificio de apartamentos, pero nadie sufrió lesiones físicas”, dijo Hedenius.
Se desconocen los móviles de la mujer, que trabajaba para una empresa contratada por el operador de trenes para realizar operaciones de limpieza.
“Sólo nos han dicho cosas positivas de ella. Estamos investigando cómo pudo ocurrir eso y por qué lo hizo”, agregó Hedenius, quien señaló que tampoco está claro en qué forma pudo la joven apoderarse de las llaves para operar el tren. Sin embargo, el portavoz consideró que no es tan difícil operar una locomotora de este tipo.
“En términos generales, eso es posible incluso si no eres un operador de trenes”, dijo. “Puedes leer esta información en internet u observar cómo lo hacen otros”. AP