“La persona que haya comprado un vehículo a un concesionario, por encima del valor aprobado por el Estado venezolano, tiene derecho a que le devuelvan el dinero”. Janet Yucra M.
La afirmación la hizo el diputado Elvis Amoroso (Psuv/Aragua), presidente de la comisión de Política Interior de la Asamblea Nacional
(AN), quien presentó el Proyecto de Ley que Regula la Compra, Venta de Vehículos Nuevos y Usados, Nacionales e importados, la cual podría estar lista en dos meses, si priva el criterio de la urgencia que el parlamentario sostiene que se debe aplicar al instrumento.
De hecho, el artículo 31 del proyecto estabece: “Las comercializadoras de vehículos que hayan realizado operaciones de compra y venta de vehículos automotores por encima del precio de venta sugerido, están en la obligación de devolver a los compradores las cantidades cobradas en exceso en un lapso de seis meses. La contravención a esta disposición será sancionada con el doble de la cantidad infringida,
sin menoscabo de las acciones civiles y penales que puedan ejercer los compradores contra las comercializadoras, sus representantes legales o responsables. El Instituto para la Defensa de las Personas en el Acceso a los Bienes y Servicios será el responsable de hacer cumplir de esta disposición”.
El diputado sostuvo que ha adelantado conversaciones “con los cuerpos de seguridad y las instituciones, para concretar estos procedimientos. Tenemos previstas reuniones con la Fiscal Genera y la presidenta del TSJ, porque estos señores (los dueños de concesionarios y comercializadoras) son una mafia organizada que tiene mucho dinero.
Tienen que ser los fiscales más idóneos y los jueces más idóneos los que deben hacer los procedimientos”.
Para Elvis Amoroso, “la Ley que regula la compra y venta de vehículos nuevos y usados, nacionales e importados, es un clamor de todos los venezolanos, tanto de los que están con Hugo Chávez, como de los que no. Es una exigencia de los que tienen dinero y de los que no, porque la mayoría de los dueños de las concesionarias en el país ha creado un nuevo modus operandi para robar al pueblo de Venezuela, descaradamente y apoderarse los vehículos, acaparándolos”.
Explicó que “este modus operandi consiste en que las ensambladoras otorgan miles de vehículos a los dueños de los concesionarios y gran parte de éstos convierten los carros nuevos en usados, pero con cero kilometros y los ubican en terrenos baldíos que generalmente están cerca de las mismas ensambladoras legalmente establecidas y en algunos estacionamientos de centros comerciales”.
Luego, “acaparan los vehículos y cuando los venezolanos se ven obligados a buscar un carro le dicen que no hay producción, y que por
la situación del dólar no los están fabricando. Pero, agregan que hay un amigo de ellos que tiene un vehículo en tal establecimiento y que
vaya para allá. Resulta que ese carro tiene hasta 400% en algunos casos de sobreprecio y allí se da la estafa”, afirmó.
Amoroso dijo que “esto se convierte en un robo descarado efectuado en su mayoría por los dueños de los concesionarios, atentando contra el bolsillo de los venezolanos y también contra la economía del país”.
Informó que la comisión lleva tiempo haciendo una investigación, en la cual determinaron, por ejemplo, que “una camioneta pic up tiene que un precio por el orden de los 180 mil bolívares, la están vendiendo en un millón de bolívares. Una camioneta pic up de doble cabina que está por el orden de los 300 mil bolívares, la están vendiendo en un millón 300 mil bolívares, es decir, un millón por encima del precio establecido.
Si un campesino o un grupo de campesinos necesita este vehículo para llevar su producción a los mercados ¿lo tiene que pagar con ese sobre precio?”, preguntó.
Agregó otro ejemplo: “Un carro Aveo que su precio está entre 160 mil bolívares y 180 mil bolívares ,el sincrónico, lo están ofertando en
500 mil bolívares. Una camioneta Toyota como la 4 Runner que es una de las más buscadas y su precio es de 550 mil bolívares, la más lujosa, la están ofreciendo un millón 750 mil bolívares. Es decir que se les fue la mano a la mayoría de los dueños de los concesionarios, quienes se han convertido en unos ladrones”.
Insistió el diputado por Aragua que “los concesionarios están afectando a todos, a la familia que quiere comprarse un carrito para
convertirlo en taxi, para ganarse la vida, así como a la gente que tiene mucho dinero. Estos señores son unos acaparadores que le juegan
sucio a la patria y a todos los venezolanos”.
Indicó que “la Asamblea Nacional venía haciendo este trabajo desde hace años y ha hecho algún acercamiento con ellos, para que bajen los precios, pero no encontramos respuestas y de diciembre para acá estos señores se han convertido en los choros más grandes de la República”.
Para dar una idea del monto de lo que él denomina “una estafa”, Amoroso manifestó: “lo decimos responsablemente , esta situación
supera la estafa bancaria que sucedió hace poco en el país. Estamos hablando de un promedio de 2 millones 500 mil vehículos que se han
producido en los últimos tres años y si tomamos en cuenta la venta con un promedio de 400 mil bolívares de sobre precio por vehículo,
tenemos una estafa sin precedentes”.
Adelantó que la comisión también ha logrado determinar que “los dueños de estos concesionarios casi todos, 90 por ciento, están viviendo fuera del país con los reales que les están robando a los venezolanos”.
Aseguró que una vez que la ley sea aprobada en primera discusión y se inicien las consultas “llamaremos a los dueños de los concesionarios para que digan cuál les su opinión y por qué están robando a la gente.
También les preguntaremos si van a devolver el dinero a los venezolanos. Se hará una consulta pública, donde llegarán los
afectados. Debemos estar hablando de que si hay acuerdo suficiente, en un mes o dos tendremos esta ley lista”.