La grafología es la ciencia que estudia el carácter y personalidad mediante el análisis e interpretación de los aspectos de movimiento, espacio y formas de los trazos gráficos.
Nuestra firma es el sello que nos representa ante los demás y ante nosotros mismos. Revela el aspecto más primitivo de la persona, es nuestra insignia. Por lo tanto, su interpretación nos permite conocer los aspectos más relevantes y genuinos del firmante. Dentro del concepto de firmas se considera: la firma legible, garabato (firma ilegible) y rúbrica (subrayados, puntos y líneas finales).
Es una ciencia e implica un conocimiento sistemático, por eso, el análisis e interpretación de una firma se basa en la identificación y evaluación de cada trazo que la compone. Veremos también su dimensión, presión, ubicación, trazos, ritmo y forma. Durante el proceso de análisis iremos discerniendo entre aquellos aspectos que son caracterológicos y los que son circunstanciales.
¿Cuál es el alcance del análisis e interpretación de una firma?
Dado que es el reflejo de nuestra parte más primitiva nos revela, entre otras cosas, adaptabilidad, espontaneidad, capacidad de comunicación, control de emotividad, nivel de responsabilidad, capacidad de decisión, nivel de ética, aptitud para liderar, aptitud para trabajar en equipo, capacidad de recibir órdenes, nivel de inteligencia, creatividad, tipo de memoria, grado de atención, nivel de agresividad, tolerancia a la presión, relación con su mundo familiar, relación y rol en su vida profesional/social, autoestima y reconocimiento, motivación e interés.
¿Cambia la firma de la persona a lo largo de los años?
¡Si! Esto se da ya que los seres humanos somos seres en evolución constante. Por lo tanto, algunos aspectos de nuestra firma se verán alterados con el transcurso del tiempo. Más allá de esto, nuestros rasgos base perduraran en el tiempo y nos acompañaran a lo largo de nuestra vida. Estos aspectos son los que llamamos – rasgos relacionados con el temperamento.
También está quien firma muchos documentos diarios y elige transformar su firma original a una versión más acotada. Sea tu versión acotada o extensa, estarás reflejándote de la misma manera, y ambas firmas son válidas para una interpretación grafológica, por lo tanto, obtendremos el mismo perfil.
En la actualidad, la grafología es considerada indispensable para muchas empresas a la hora de seleccionar personal, evaluar la potencialidad de sus recursos al momento de tomar una decisión en cuanto a promociones o cambios de área. Como así también, como herramienta de apoyo en la formación de equipos de trabajo o procesos de fusión de empresas.
Algunos consejos previos a una evaluación grafológica
* Utilizá el trazo habitual; si estás acostumbrada a escribir en imprenta, hacelo. No es necesario utilizar letra cursiva cuando solicitan una carta manuscrita.
* Tené en cuenta que tu letra y firma es la mejor opción, ya que hablarán de vos. Evitá pedirle a un tercero que lo haga.
* Una letra estética no necesariamente es una letra positiva bajo la mirada de un grafólogo. Sé espontánea.
* Si la consigna es enviar una carta manuscrita, asegurate que tenga más de diez renglones. De esta manera le brindarás mejor material para el desarrollo del reporte, siendo éste más específico y fiel a su perfil profesional.
* No existen firmas buenas o malas, todo dependerá de qué competencias se estén buscando.
* Recordá firmar la carta manuscrita, ya que la firma es de gran valor en un reporte grafológico.