“Reivindiquemos al Bravo pueblo de Venezuela”Con el ánimo de contribuir al debate nacional, varios dirigentes presentaron una propuesta que defiende la Constitución, pero valora la protesta y el reclamo de los derechos. “Basta ser sumisos ante el fraude, el gobierno de facto y el coloniaje al que estamos sometidos”, señalaron.
“Me pueden llamar mil veces radical. Lo que nunca podrán decir, es que he sido colaboracionista con este régimen”, con esta advertencia inició Diego Arria su participación en el acto fundacional de la denominada Junta Patriótica que se propone luchar de manera amplia y organizada por el rescate de la institucionalidad en Venezuela.Arria compartió las líneas matrices de la Junta, aunque advirtió que la misma no es más que la puerta para la conformación de una Gran Alianza Nacional que se active por el rescate del país, perdido en manos de un gobierno de facto y diversos sectores de una oposición que pretende seguirle el juego al régimen.
Reivindicó la propuesta pacífica de los venezolanos, expresa durante la jornada del 11 de abril de 2002, “que ha querido mancharse como violenta, cuando en realidad se trata de la más importante manifestación civil de protesta hecha en el mundo”.Criticó la manera sumisa como algunos sectores se han ido adormeciendo y con ello, llevando a la sociedad al letargo. “Muchos dicen que habría que cambiar el coro del Himno Nacional porque aquí no hay bravo pueblo. Pues yo digo que sí hay bravo pueblo, lo que no hemos tenido son bravos dirigentes”, sentenció.
En sus palabras reivindicó las luchas sindicales libradas por Carlos Ortega, la que adelantó con dignidad Franklin Brito, la que lideraron los estudiantes en 2007 para impedir que se concretara la reforma constitucional, pero sobre todo la que se escenifica hoy a las puertas de la OEA en Caracas.“Algunos preguntan que por qué no fui al acto de la MUD en el Parque Miranda.
Mi respuesta es que el 23 de enero, la mayor demostración de gallardía, se sensatez, de amor por el país, de llamado a la Patria para defender los valores, no se mostró a lo interno de un gimnasio; eso se evidenció en las cadenas de esos estudiantes. Se ven encadenados; pero en realidad están liberados de cualquier posibilidad de cohabitación o de complicidad con el régimen”, sentenció.Arria coincidió con Pablo Medina en la necesidad de sembrar el germen de la Junta Patriótica en cada parroquia, en cada urbanización, en cada pueblo, en cada empresa, en cada sector eclesiástico, empresarial, vecinal, académico, para así demostrar que la Unidad necesaria trasciende los escenarios electorales, porque no se trata solo de ganar unos comicios, sino de rescatar la democracia, de refundar al país en valores que inspiren e inviten a crecer.
Las palabras de Diego Arria fueron interrumpidas por la llegada de Pompeyo Márquez, quien se sumó a las más de 500 personas presentes en las instalaciones del Teatro Chacaíto, en Caracas, que no fueron trasladados, ni portaban pancartas, ni estaban listos para aclamar -al oir la señal- a un posible candidato. Márquez, con su presencia, ratificó el sentido de amplitud de esta propuesta, que prometió reproducirse en todos los rincones del país.El dirigente cerró su intervención recordando lo que se ha constituido en su lema: “El día en que los venezolanos nos unamos de verdad, nos vamos a maravillar de las cosas que juntos podremos alcanzar”.Primera acción de la Junta PatrióticaTras el acto, que cerró con emotivas palabras de Pompeyo Márquez, quien dijo sentirse –cerca cumplir 91 años- optimista sobre el futuro de Venezuela; la asamblea decidió acudir a la sede de la Organización de Estados Americanos, OEA, para brindar apoyo a los jóvenes que desde ese sitio libran una lucha por la restitución del orden constitucional.
Prensa Diego Arria