El gobierno colombiano no “se va a dejar desviar” del diálogo de paz con las FARC, dijo este miércoles su delegado principal en las conversaciones con la guerrilla, Humberto de la Calle, antes de partir a Cuba para una nueva sesión de pláticas que comenzará el jueves.
“La orden del presidente (Juan Manuel Santos) a la fuerza pública es seguir persiguiendo a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). La orden a esta delegación es seguir trabajando en un acuerdo para terminar el conflicto. De ese objetivo no nos vamos a dejar desviar”, dijo De la Calle.
Las declaraciones del jefe negociador del gobierno se producen luego de que la delegación de las FARC en La Habana publicara un comunicado en el que resaltó que “se reserva el derecho a capturar como prisioneros a los miembros de la fuerza pública que se han rendido en combate”, en alusión al secuestro de dos agentes de la policía la semana pasada, que le atribuyen las autoridades.
“Mientras que la comunidad internacional señala que no es por la vía de las armas como se obtienen los cambios y apoyan generalmente las negociaciones, las FARC dan esta respuesta equivocada, que atenta contra el proceso”, aseveró De la Calle.
“Vamos a La Habana para terminar el conflicto, que es lo que pactamos. Si no es así que nos lo digan de una vez, para no hacerle perder el tiempo al gobierno de los colombianos”, añadió.
Las FARC declararon una tregua unilateral entre los pasados 20 de noviembre y 20 de enero, y han planteado un cese del fuego bilateral, opción que el gobierno rechaza.
“No nos vamos a dejar presionar para que hagamos un cese de operaciones (militares)”, insistió el delegado gubernamental.
En febrero del 2012, las FARC anunciaron su renuncia al secuestro extorsivo de civiles y liberaron a los últimos 10 policías y militares que tenían en su poder, que formaban parte de un grupo de hasta 60 rehenes retenidos por motivos políticos desde la década de 1990.
El cese del secuestro fue planteado por el presidente Santos como un requisito indispensable para considerar un diálogo de paz.
El gobierno colombiano adelanta desde noviembre de 2012 en Cuba un proceso de paz con las FARC, la principal guerrilla de Colombia con 48 años de lucha armada y unos 8.000 combatientes en la actualidad.
AFP