Control de precios triplicó la escasez de alimentos

Control de precios triplicó la escasez de alimentos

Las fallas de alimentos básicos en Venezuela promediaba 5% antes de 2003 cuando se aplicó el control de precios, al cierre del año pasado el Banco Central de Venezuela registró un índice de 16,3%, 3 veces más que hace 10 años.

La regulación de precios, además de problemas con el alza de la materia prima importada en 2007, hizo que el país tuviera un índice de escasez de 20,60% en abril de ese año. Pero la mayor variación se registró en enero de 2008 alcanzó la cifra histórica de 24,70% según el ente emisor.





 

Texto diario El Nacional

Luego de 10 años de aplicación del control, las fallas de productos de consumo masivo, principalmente alimentos, se intensificaron. El BCV admitió que 6 productos básicos registraron escasez grave a finales de 2012, entre ellos harina de maíz, harina de trigo, azúcar, aceite de girasol, aceite vegetal y aceite de maíz, que faltaron en promedio entre 40% y hasta 80% de los establecimientos encuestados por el organismo emisor. El pollo, la carne de res, la leche en polvo, el queso, y el café molido también reportaron fallas significativas entre 20% y 40%.

Para el presidente de la Cámara Venezolana de la Industria de Alimentos, Pablo Baraybar, los productos que han tenido mayores índices de escasez son los regulados, porque tienen precios fijados por debajo de los costos de producción y, además, las empresas están sometidas a restricciones.

“Hay varios factores negativos, entre ellos el control de precios por 10 años, que han destruido la capacidad de las empresas para invertir y para tener más días de inventario. Prácticamente nos prohíben ampliar en inventario. También están los conflictos laborales”, señaló.

Considera que la industria podría estar produciendo más, pero mientras se tengan problemas como la falta de divisas para comprar equipos y repuestos y los retrasos en la liquidación de dólares, esto no será posible.

“Estamos trabajando con inventarios que están al día, y cualquier problema paraliza una línea de producción”, advirtió Baraybar.

Igualmente, cree que el control no ha sido efectivo. “La inflación en 10 años supera 1.200% y en los productos regulados el incremento promedia 490%. Los productos controlados sólo subieron una tercera parte, pero a cambio de esto hay menos producción. Es imposible producir a pérdida y con costos, como transporte, materia prima, flete, envases y mano de obra, que se incrementan constantemente”, indicó.

Recordó que en 2007 la industria producía 25% más alimentos que en el año 2000. Cuando se aplicaron nuevas medidas de regulación, como las guías de movilización y las cuotas de producción de rubros regulados y se dejaron de ajustar los precios de forma periódica, comenzaron los problemas. A esto se sumó las fallas eléctricas entre 2009 y 2012, la devaluación y los ajustes por debajo de los costos en los últimos 3 años, la reducción en la entrega de divisas en 2012 y recientemente las medidas laborales que asfixian la operatividad de las empresas.

 De temporal a permanente. Cuando se aplicó el control de precios en 2003, voceros del Gobierno indicaron que sería una medida temporal para enfrentar las consecuencias del paro petrolero y para frenar el alza de la inflación. Sin embargo, la regulación se volvió una medida permanente.

Luis Vicente León, presidente de Datanálisis, señaló que luego de 10 años el control ha demostrado que es una política ineficiente, que junto con el control de cambio y la política de expropiaciones amenazan al sector privada. “Ha destruido la capacidad productiva de las empresas”, afirmó.

Sostiene que el consumidor es el más afectado porque tiene que recorrer varios comercios para conseguir los productos y se encuentra con una oferta limitada.

Aclaró León que las políticas de controles han afectado a la industria de alimentos 4 veces en los últimos 40 años. “No es un problema exclusivo del chavismo”, indicó.

La primera regulación, recordó, la aplicó Luis Herrera Campins, período durante el cual el país tuvo la inflación más alta. Luego Carlos Andres Pérez también controló los precios y el índice inflacionario superó 100%. Rafael Caldera, que aprobó el precio máximo de venta al público, pero la inflación no se frenó y llegó a 113%, junto con problemas críticos de abastecimiento. Y ahora, con Hugo Chávez, va una década de regulación con constantes fallas en el suministro y venta de bienes. “¿Si el control de precios es tan bueno, luego de 10 años, no tendríamos que tener un abastecimiento pleno y una estabilidad de precios?”, cuestionó.