Siete militares colombianos muertos y otros cinco heridos dejó hoy un enfrentamiento con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), en un caserío del departamento del Caquetá, informó a Efe una fuente castrense.
“Tenemos siete militares colombianos muertos”, dijo la fuente que precisó que los enfrentamientos se registraron en la población de Milán, del selvático departamento del Caquetá (sur).
Posteriormente, un comunicado del Ejército colombiano agregó que además de los siete militares muertos, otros cinco resultaron heridos y fueron traslados a un hospital regional.
Según el Ejército, los enfrentamientos se presentaron a raíz de que la inteligencia detectara la intención de varias columnas del Bloque sur de las FARC de atacar el caserío San Antonio de Getuchá.
“Por tal motivo, se lanzó una operación en lo profundo de las entrañas del Bloque Sur, con el propósito de proteger a nuestra población civil de San Antonio de Getuchá, presentándose combates con el grueso de la estructura terrorista”, señaló el comunicado del Ejército.
Agregó que por información de inteligencia se tiene conocimiento de que el Bloque Sur “está evacuando un número indeterminado de terroristas muertos y heridos”.
Este revés del Ejército se presenta en momentos en que las FARC y el Gobierno colombiano están inmersos en diálogos de paz en La Habana, con la intención de ponerle punto final al conflicto armado que azota al país andino desde hace casi medio siglo.
El pasado 20 de enero las FARC pusieron fin a una tregua unilateral de dos meses, tras la que intensificó los ataques contra el Ejército, la Policía e incluso contra la población civil.
Pese a esto, el presidente Juan Manuel Santos ha dicho que espera alcanzar la paz “por la buenas o por las malas”.
El más reciente ataque de los rebeldes se registró el pasado lunes, en el departamento del Guaviare (sur), en donde murieron un niño de 10 años y un agente de policía. Igualmente hubo 28 heridos, entre ellos tres policías.
La muerte de los militares a manos de las FARC se da en la víspera de un operativo a través del cual esa guerrilla se apresta a dejar en libertad a los policías Cristian Camilo Yate y Víctor Alfonso González, que fueron secuestrados el 26 de enero entre los municipios de Pradera y Florida, en el departamento del Valle del Cauca.
También al soldado Josué Meneses, quien fue hecho cautivo en combates registrados el día 31 de ese mismo mes en Policarpa, en el vecino departamento de Nariño, fronterizo con Ecuador, en los que fallecieron también cuatro militares.
Este operativo, que el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) y la ONG Colombianos y Colombianas por la Paz coordinan a esta hora en Cali, capital del Valle del Cauca, constará de dos fases el jueves y el sábado y se hará por tierra. EFE