El atleta sudafricano Oscar Pistorius sigue en duelo por la muerte de su novia, la modelo Reeva Steenkamp, y renuncia a entrenarse por “respeto” a la familia de la difunta, según la portavoz del deportista, Lunice Johnston.
“Oscar está todavía en un profundo duelo y no podrá, de ninguna manera, volver a entrenar pronto”, dijo Johnston, citada hoy por el diario sudafricano “Beeld”.
El corredor, de 26 años, atraviesa aún “una etapa de mucha sensibilidad” tras haber sido acusado del asesinato a tiros de Steenkamp, de 29 años, el pasado día en el domicilio del deportista en Pretoria.
Un juez concedió el pasado viernes la libertad bajo fianza por unos 85.000 euros a Pistorius, a quien se le ha retirado el pasaporte y se le ha prohibido tanto el manejo de armas de fuego, como salir de Pretoria.
El velocista aguarda en libertad con su familia su próxima comparecencia judicial, prevista para el próximo 4 de junio.
El atleta y su familia celebraron anoche una ceremonia privada en recuerdo de Steenkamp, según confirmó a Efe la portavoz del velocista acusado de asesinato.
La Fiscalía acusa de “asesinato premeditado” a Pistorius, un cargo que podría costarle la cadena perpetua.
Por su parte, el corredor asegura que disparó a Steenkamp a través de la puerta del baño pensando que lo hacía contra un intruso.
Pistorius hizo historia el pasado agosto en Londres al convertirse en el primer atleta con las dos piernas amputadas en participar en unas Olimpiadas.
El deportista sudafricano corre sobre dos prótesis de carbono, cuya forma le ha valido el sobrenombre de “Blade Runnner” (“El corredor cuchilla”), en referencia a la película del mismo nombre de Ridley Scott. EFE