El ex primer ministro y actual líder de la coalición de centroderecha italiana, Silvio Berlusconi, es investigado por la Fiscalía de Nápoles (sur de Italia) por supuestos delitos de corrupción y financiación ilegal de los partidos.
EFE
La investigación está relacionada con el supuesto pago de una suma de dinero cuantificada en tres millones de euros al senador Sergio De Gregorio en relación a su paso al conservador partido Pueblo de la Libertad (PDL), cuyo presidente es Berlusconi, informaron hoy los medios italianos.
Además de los fiscales, Vincenzo Piscitelli y Henry John Woodcock, que el año pasado ya investigaron a De Gregorio, en esta pesquisa, en la que también resulta indagado Walter Lavitola, exdirector del diario “Avanti”, participan los fiscales antimafia Francesco Curcio, Alessandro Milita y Fabrizio Vanorio.
En virtud de esta investigación los fiscales han dispuesto además la confiscación de una caja fuerte de Silvio Berlusconi y han enviado al Parlamento una solicitud de registro de la misma por la condición de aforado de “il Cavaliere”, en tanto que es diputado de la pasada legislatura y senador electo en los pasados comicios generales del domingo y lunes.
Asimismo, la Fiscalía de Nápoles ha pedido al Parlamento el permiso para hacerse con las listas de llamadas telefónicas realizadas tanto por Berlusconi como por De Gregorio y ha enviado al ex primer ministro una notificación para que preste declaración por este caso.
Tras conocerse esta noticia, el secretario político del PDL y exministro de Justicia, Angelino Alfano, divulgó un comunicado en el que denuncia una nueva “agresión” por parte de la magistratura hacia Berlusconi cuando aún están muy recientes las elecciones generales y anunció una “gran manifestación” en defensa de la soberanía de su partido y de la democracia del país.
“Todo esto mientras el país vive una delicada fase de transición institucional en la que el presidente Berlusconi será llamado a ejercer una grandísima influencia como líder del PDL”, afirma Alfano en la nota.
“Esta circunstancia deja claro la acción política de la magistratura y nosotros dejaremos claro y evidente la defensa de la soberanía popular y lucharemos con todas nuestras fuerzas para que esta soberanía sea respetada”, prosigue.
El ex primer ministro tiene juicios pendientes como el caso “Ruby”, en el que está acusado de incitación a la prostitución de menores y abuso de poder, en el que los fiscales sostienen que Berlusconi, de 76 años, mantuvo relaciones sexuales en trece ocasiones con una menor de edad.
También tiene pendiente el proceso en apelación por un delito de fraude fiscal en el llamado caso Mediaset y, en primera instancia, el caso Unipol, relacionado con la publicación de escuchas telefónicas de procedencia ilícita en el diario “Il Giornale”, propiedad de su hermano Paolo.