(Minuta Política sobre la Nueva Dirección del Estado Venezolano según Maduro: la Dirección Político Militar de la Revolución Bolivariana – DPM de la RB-)
Quizá muchos aun no han notado el profundo contenido, decisorio, de una reiterada afirmación de Nicolás Maduro, presidente de la republica por testamento político. El dice y repite cuando habla sobre lo que se pondrá en marcha según la frase: “por decisión de nuestra dirección político militar”.
Ya no estamos, y eso apenas transitados breves días de la transición, frente solamente a una decisión paralegal , como la de designarlo simultáneamente Presidente y candidato, por parte del combo institucional reconocido por la oposición legalista, estamos ante el gobierno de la Dirección Político-Militar de la Revolución Bolivariana, a menos que el desconocimiento que hizo su principal vocero opositor Capriles, a esta presidencia provisional, implique un cambio radical de orientación hacia y en contra la hegemonía de los herederos de esta piltrafa de régimen, que en esta etapa incierta para los estómagos opositores, más bien quizá buscan ajustarse, con un nuevo arreglo, en la vista de las elecciones municipales, una vez que la mayoría de las clientelas regionales fueron echadas de las gobernaciones “opositoras”, que les dieron sustento hasta diciembre 2012, en esa la primera gran barrida, quedando pendiente la definitiva de las municipales, si es que así lo resuelve la marabunta castrista cubana.
Unos diputados de “oposición” madrugando como asomados, en la juramentación fraudulenta, quizá cojan agua clara, para despecho de quienes se mantuvieron del lado del “líder” Capriles, que ofendido por primera vez en 14 años, dícese dispuesto a no aceptar el fraude institucional de Nicolás, sin aclarar sin embargo que también eso implica el desconocimiento de su preciado CNE, la institución fundamental que convalida los fraudes de supuesta legitimidad, lo cual probará de nuevo ahora, dándole el chance que en 10 días de campaña, se desmonte el impresionante despliegue de maquinaria, de exorbitante fanatismo, que operará de inmediato como ventajismo electoral plebiscitario a favor del “designado” , porque fue en lo que convirtieron el Funeral de Estado que sigue y quien sabe por cuánto tiempo.
¡Cómo es evidente que solo pueden existir como lunas vagando alrededor de un sol que colapsó y que irremisiblemente dejará de emitir luz y gravitación, provocando a su vez el propio colapso de todos ellos ¡. Es solo cuestión de tiempo. Y los tiempos de la economía global y de Internet, se miden en nano segundos y con terabytes transmitidos a la velocidad del laser.
En virtud de esto, el titulo de esta Minuta Política sobre la Nueva Dirección del Estado Venezolano no es casual, pero tiene dos sentidos. Uno recoge la obviedad de como la naturaleza puso fin a la vida del líder y no fue el imperio “inoculador” y este hecho monumental desata el proceso de descomposición y merma acelerada del movimiento chavista, así saque el 14 de abril 101 % de los votos, porque su ruina vendrá a partir de su confrontación con la realidad como gobierno, incapaz de resolver el drama de nación que heredamos de los 14 años de despilfarro y retrocesos, y en otro sentido este título es el que mide la cuenta regresiva de la famosa “Dirección Político-Militar de la Revolución Bolivariana ” que se anunció Maduro, ( llamémosla DPM de la RB, para abreviar)
Conociendo las gravísimas limitaciones de las individualidades de su equipo, Chávez escogió como sucesor a quien el estimó mantendría la unidad del grupo dirigente, disciplinándolo no precisamente alrededor de su fuerte personalidad, sino más bien como una persona afable, con la paciencia y tolerancia del buen tipo, de lealtades probadas, que entendería que las arpías que revolotean en todas esas parcelas de poder, que ahora se lanzaran a entre-devorarse, solo pueden intentar coexistir coordinadas por alguien que les deje sus parcelas de poder e incluso, y esto es lo grave, agregue nuevas porciones, que antes eran del gran timonel, ahora ausente o de los espacios regateados por la oposición en el aparato de estado y en la economía, que por cierto sigue siendo capitalista hasta los tuétanos, a pesar de la estúpida propaganda oficial que solo la creen los que van siendo expropiados y confunden su desgracia con el supuesto final de cinco siglos de profundización de relaciones mercantiles capitalistas, y de acrecentados nexos de dependencia agónica con el imperialismo económico financiero mundial, que ahora incluye a China, Rusia y Brasil, nuestros nuevos amos, título que comparten en el terreno político con el estado castrista cubano, que paradójicamente es al propio tiempo nuestra sanguijuela, pero reportándonos solo pasivos.
Chávez confió la herencia a su pupilo de mayor fanatismo a su obra, a sus lealtades internacionales, le confió también el discurso sobre enemigos reales y virtuales. Le habrá dicho: Insulta al imperio pero no se te ocurra pelear en serio con ellos, mantén los lazos comerciales y financieros, que es lo que les interesa, véndeles petróleo, pero devuélveles muchos de sus dólares y Maduro cumplió desde el año pasado importando 40 % adicional desde USA. Sigue explotando el discurso contra “la oligarquía” que ha sido históricamente el más rentable de todos, por siglo y medio, y como fundamento de nuestro liderazgo.
Como si fuera un barco de pesca de arrastre el liderazgo de Chávez se fue llenando de criaturas de todos los tipos y tamaños, desde abnegados servidores públicos hasta banqueros prófugos, estafadores, pranes, mafiosos, haraganes, arribistas y depredadores de toda laya.
Chávez sobre todo recogió el apoyo de un gran sector del pueblo humilde y noble en busca de su redención social, que le tributa hasta un afecto desconocido en la historia venezolana, y también sumó a su pesar o no, a los burócratas y demagogos que utilizan esa lealtad para hacerse ricos y acumular poder.
Lo que Chávez entonces no pudo legarle a Maduro es cómo manejar la vorágine de intereses contrapuestos, entre las logias, mafias, clanes, fracciones, grupos, grupetes, que fue arrastrando tras su liderazgo de medio país, que incluía por supuesto una parte importante de la hez social, de la gentuza y bicharracos de toda ralea, todos revoloteando como moscas el excrementicio del diablo denominado ingreso nacional, para depredarlo y que por lógica en toda esta etapa, se acercaron fue al gobierno en su mayor número, porque en la oposición solo había migajas.
No se crea sin embargo que gracias a esto lógicas “membrecías sociológicas” no exista también en la oposición una buena dosis de gentuzas, aunque sea solo en tributo a la estadística.
“Dirección Político-Militar”, quiere decir dirección colectiva, pertenece a la nomenclatura soviética, china y cubana, pero si no hay un jefe único como Chávez, Fidel-Raúl, Stalin, Mao lo único que queda: son purgas, “revoluciones culturales” sangrientas, madrugonazos y destituciones sorpresivas, para escoger OTRO miembro de la “dirección político militar” que de la talla, para evitar el naufragio. Sobre estos escenarios se han escrito mil libros, y puede pronosticarse con 100 % de garantías que llegan esas coyunturas de ajuste de cuentas y desplazamientos anunciados como el rayo trae al trueno.
El régimen político venezolano, heredero bastardo de la democracia punto fijista anterior, así renieguen de ella diariamente, tiene el “defecto” mortal de su origen electoral, así sea ahora fraudulento y “sobrevenido”.
Así que señor Maduro, usted mismo se ha hecho trampa, al renunciar a muchas prerrogativas como las tuvo en exceso su jefe, al subordinarse usted ahora a una “dirección político Militar de la Revolución Bolivariana, a todas luces ilegal, ilegitima y sobre todo espuria, porque su único jefe histórico posible yace embalsamado, aunque en su nombre y discutido con usted en vida del comandante, los Castro de hecho forman parte secreta, pero decisiva de esa “DPM de la RB” .
Apostaría la cabeza de no ser porque me tomen la apuesta literalmente, a que un componente decisivo, con voto de imperativa sumisión en esa conducción, es el de un miembro delegado de los hermanos Castro, en consulta diaria con la jefatura del estado de nuestra nueva madre patria colonial chula cubana.
Les voy a dar un elemento conclusivo del porque la guerra fraccional comenzará a despedazar la herencia y abrirá cada vez mas importantes brechas a la crisis y al vacío de poder futuro.
No voy a referirme al destrozo de la moneda, o al peso explosivo de la deuda o a la incapacidad, ahora sin el contrapeso de la crítica y frenos desde la jefatura del Estado bajo Chávez, no me referiré a la aceleradísima confusión y desilusión, que aunque mantenga viva lo que recuerdan bien de Chávez, echarán TODAS las culpas de las infinitas calamidades cotidianas a la manga de incapaces que él dejó en el poder.
Por ello, aunque todos sepamos que la herencia no era solo de títulos rimbombantes, que la herencia la constituye esta espantosa crisis nacional por explotar, que dejaron los 14 años de calamitosa gestión “revolucionaria”, nadie discutía la UNIDAD de mando único e indiscutible de Chávez que se imponía sin discusión alguna en todos los niveles del Estado y nunca hubo otra cosa que no fuese SU dirección.
Pero ahora y por lo pronto el agregado “MILITAR” explícito en la nueva terminología de esta nobel nomenclatura de la DPM de la RB, quizá contiene la vana intención de atemorizarnos como civiles, pero Nicolás mas que nadie sabe, que ese es un término de la nueva ecuación del poder político, donde las cúpula chavista de la FFAA se reserva una tajada aún más importante que en el pasado, lo cual parecía ya imposible de superar, solo se explica en que por ausencia de Chávez, ahora los interlocutores del poder directo que pertenecían a varios de sus exorbitantes poderes , querrán repartírselos cuanto antes entre los miembros de las logias dominantes. Si no se apura a Maduro solo le quedará el manejo del protocolo y la simbología de la continuidad problemática de aquel liderazgo omnímodo que él no puede ni siquiera imitar porque ya ve como le queda de ridículo andar echando cuenticos y por favor que no se le ocurra cantar porque allí si la pone completa, a no ser que haya escondida una extraordinaria voz operática que berree sin desafinar rancheras y corridos.
Por su parte la clave de todo el acomodamiento de Diosdado, a ese supuesto despojo de su natural herencia constitucional a la presidencia, a la que renunció de buena manera, es porque él es la bisagra del poder civil y político, que encarna desde la dirección del PSUV y desde la Asamblea Nacional, que dispone de TODOS los poderes, con los mandos militare por si le faltara alguno, por cuanto él queda como jefe del ala militar del poder a través de la DPM de la RB, así Maduro tenga algunas potestades, que se empeñan en destacar otros voceros militares en competencia por imponer su sello al coroto, no tendrán suerte alguna por no ser del riñón del ejercito.
No duden que empezó una etapa cualitativamente distinta del régimen, condenado a su rapidísimo deterioro, porque si algo podemos decir quienes ni amamos a Chávez y lo adversamos cada minuto de su liderazgo, es que la diferencia entre sus características y las de los lideres sustitutos, es tan abismal que huelgan los comentarios.
Estos “herederos”, dándoselas de vivos, ponen la elección de Maduro el 14 de Abril, fecha que conmemoran la vuelta de Chávez al poder perdido y reasignado por el Ejército, luego de la trastada de Carmona, que embaucó la gran rebelión civil del 10 y 11 de abril 2002.
Deberían recordar que en esa misma fecha Chávez volvió, crucifijo en mano, a pedir perdón por todos sus dislates, aunque después cambiaron la historia, y las correlaciones de fuerzas, ante otros disparates suicidas de la oposición, que le brindó poder absoluto a Chávez y su régimen.
¿Cuál creen ustedes amigos lectores que sea nuestro destino inmediato?: ¿Acaso una dura dictadura que Chávez nunca pudo o no quiso imponer, o en gobiernito que durará lo que dure la unidad de la DPM de la RB?
No olviden el detalle que muchos del ala militar de la DPM de la RB, no se calan ni a los cubanos ni a Maduro. Lo dicen a os cuatro vientos. Y ESO es la diferencia entre lo que se valía o permitía decir de Chávez y lo que frenéticamente dicen del conciliador Maduro, que estará allí mientras no invente creerse en serio que él puede sustituir al caudillo, porque ese día le pesará el resto de su larga vida, que espero la disfrute, sin el poder por supuesto, esperando más bien que “lo inoculen” pero de pánico, dada la misión imposible que está asumiendo, lo que le aconsejará, imagino, alguna ponderación.
Maduro solo tiene una posibilidad de convertirse en un líder duradero, el problema es que tal cometido es para un verdadero jefe que sea capaz incluso de hacer lo opuesto a su mentor.
Mande al carajo a los Castro, conviértase en el Presidente de todos los venezolanos, abra un diálogo de gran envergadura con la oposición, conviértase en el democratizador real y efectivo de este régimen que solo representa a burócratas insolentes e incapaces, inaugure una sólida amistad con el estado USA y la CEE, sin necesidad de romper con China y Rusia, propónganos si quiere una federación con Brasil, con Colombia, con los andes bolivarianos , pero no con esa pobre Cuba, asolada por esa tiranía comunista, déjela librada a su suerte, no financie mas la reconducción de esa bosta de régimen totalitario, que Obama lo financie, si eso es lo que les conviene, descentralice a fondo, eríjase en el gobierno de un amplio control parlamentario y mil medidas más que lo harían un presidente excepcional , a pesar de su vicio de origen.
Si quiere no haga elecciones, porque se lo comen vivo todos los hoy conmilitones suyos que lo sacarían, pero no se monte en fraudes a la voluntad popular, asuma que quien se roba los dineros públicos debe estar preso, porque los dineros del pueblo no pueden seguir creando fortunas obscenas entre la boli-burgesía,. Hay mil maneras de conservar el poder pero usted hasta hoy está buscando el único efímero, porque se lo ha limitado usted mismo con la aceptación de la tutela cubana y esta rocambolesca DPM de la RB.
Oh vana ilusión, despierten los que narcoticé, Maduro es y seguirá siendo el mandadero de una coalición de poder que incluye a los Castro, a la alta burocracia depredadora y sus plutócratas y seguirá con la estafa ideológica aprendida de memoria, como justificativo de su propio fanatismo sectario.
Maduro durará lo que decida el componente militar, que tiene conque hacer subordinarse a todos los otros poderes en medio de la crisis, que se abrirá el ancho cause a la hora de las realidades y del fin de las ficciones del ala civil, de su propio cuento que se han creído ellos mismos, para seguirse tomándose hasta con tontas solemnidades, como los dueños de un poder supuesto absoluto que tiene sin embargo fecha cierta de corte. No sabemos para cuando…ellos mismos lo irán declarando.