Al Galatasray le hubiera bastado el 2-2 pero el gol en el descuento resume la trayectoria de un partido que estuvo lleno de dramatismo hasta el final, cuando el Schalke estaba completamente volcado al ataque en busca del gol que le diera la clasificación.
El Galatasaray tuvo el mejor comienzo y empezó a llegar a la portería del Schalke a las primeras de cambio, en un partido de gran intensidad y con muchos duelos individuales por el balón en el centro del campo,
En los primeros diez minutos, los turcos ya habían dispararon tres veces a puerta. El primer intento lo hizo Hamit Altintop en el minuto 3, con un remate de media distancia.
Luego, en el minuto 6, Didier Drogba probó con un remate desviado desde la media luna y, en el 7, otra vez Drogba, dentro del área, estuvo a punto de marcar pero el meta Timo Hildebrand reaccionó con una buena parada.
El Galatasaray era claramente el mejor equipo ante un Schalke que perdía la pelota muy rápidamente y parecía sorprendido por la agresividad de la marca turca.
Sin embargo, fue el Schalke el equipo que se fue en ventaja, por intermedio de Roman Neustädter en el minuto 17, en medio de un enredo que se produjo en el área turca después de un saque de esquina.
El Galatasaray se recuperó pronto del golpe y siguió fabricando llegadas hasta que, en el minuto 37, logró el empate con un remate desde 30 metros de Altintop.
Apenas cuatro minutos después, llegó el segundo para el Galatasaray en un contragolpe, que se inició en una pérdida de balón de Neustädter. Burat Yilmaz le ganó el duelo de fuerza y velocidad a Benedikt Höwedes y definió con una vaselina ante la salida de Hildebrand.
El marcador con que los equipos se fueron al descanso marcó el libreto del partido en la segunda parte. El Schalke se volcó al ataque y el Galatasaray retrasó un poco sus líneas.
La situación abría las puertas bien para que el Schalke lograra el empate o para que el Galatasaray sentenciara en un contragolpe.
Los turcos tuvieron una buena oportunidad en el 52, cuando Hildebrand se lució con una buena parada ante un remate de Yilmaz. Pero después el Schalke empezó a aproximarse y las ocasiones empezaron a llegar.
La más clara fue un remate al larguero de Marco Höger poco antes de que, en el minuto 63, el brasileño Michel Bastos lograra el 2-2 para el club de Gelsenkirchen
El 2-2, sin embargo, no era suficiente para el Schalke y el acoso tenía que continuar y continuó.
En el 66, el meta uruguayo Walter Muslera salvó al Galatasaray con una gran parada ante un remate de Julian Draxler. Y otra vez en el 76 cortó en última instancia un centro del mismo jugador que hubiera permitido que Teemu Pukki definiera a puerta vacía.
Al final, sin embargo, lo que llegó fue el gol de Bulut, en el último instante del descuento, cuando mucho hacía pensar que todo iba a ser una cuestión de reservas físicas y que el Schalke parecía tener más.