Desde 1996, el 1 de abril se celebra en todo el mundo, el Día Internacional de la Diversión en el Trabajo (Fun at Work Day). Este día sirve para reflexionar sobre el trabajo y recordar que no debe ser aburrido, tedioso ni solemne; al contrario, debemos hacer todo lo posible por sentirnos contentos con lo que hacemos, esforzarnos y tener detalles diarios, como sonreír a los compañeros, para hacer de nuestro empleo una actividad más feliz.
Está comprobado que el buen humor trae beneficios a la salud y que además es positivo para cualquier organización o empresa, ya que, según un estudio publicado en la revista Psychological Science, la alegría mejora la creatividad. El buen humor, además de mejorar las relaciones laborales, disminuye el estrés, lo que permite una mejor toma de decisiones.
Así que, tomar un breve descanso durante el trabajo para escuchar buena música o para charlar un poco, no es necesariamente una pérdida de tiempo sino una inversión en el humor del trabajador, que puede traducirse en mayor productividad, ya que se reintegrará a sus actividades sintiéndose mucho más relajado y creativo.
Talía Elizabeth Morales Hernández