China anunció el viernes la muerte de una sexta persona a causa de una cepa de la gripe aviar, mientras que las autoridades de Shanghai suspendieron la venta de aves de corral vivas y sacrificaron todas las aves en el Mercado donde el virus fue detectado que se vendían palomas como si fuera carne de ave.
El sacrificio masivo de las aves constituye hasta el momento la primera respuesta del gobierno al brote de la cepa H7N9 de la gripe aviar, que ha afectado a 14 personas, muchos de ellos de gravedad en el litoral oriental en los primeros casos que fueron anunciados el domingo.
Las autoridades mostraron el viernes, inusuales fotos de funcionarios de salud animal con máscaras como protección durante la noche en el mercado.
El Ministerio de Agricultura confirmó el jueves que el virus H7N9 había sido detectado en cerdos en un mercado de Shanghai que vende productos agrícolas.
Se desconoce cuántas personas han enfermado por el virus, y las autoridades de salud y los científicos advirtieron que no hay indicios de que pueda ser transmitido de una persona a otra. Los científicos que han estudiado la secuencia genética del virus dijeron esta semana que podría haber sufrido una mutación, propagándose con más facilidad a otros animales y planteando potencialmente una amenaza mayor para los humanos.
Las directrices emitidas el miércoles por la agencia nacional de salud dijeron que corren especial peligro los carniceros, avicultores y vendedores de aves, y los que trabajan en las plantas procesadoras de carne.
Los especialistas identificaron el primer caso el domingo. Algunos de los 14 casos confirmados se enfermaron hace varias semanas pero sólo ahora han sido considerados víctimas del H7N9.
Xinhua dijo que seis casos han sido confirmados en Shanghai, cuatro en Jiangsu, tres en Zhejiang y uno en Anhui. AP