El papa emérito Benedicto XVI se trasladará esta semana, presumiblemente el jueves 2 de mayo, al monasterio Mater Ecclesiae que se encuentra en el interior del Vaticano, donde residirá definitivamente, informaron hoy fuentes vaticanas.
El pasado 25 de abril, el portavoz vaticano, Federico Lombardi, informó que las obras de restauración del monasterio ya han concluido y que, “como estaba previsto”, el papa Ratzinger se mudaría desde la residencia de Castel Gandolfo, a una treintena de kilómetros al sur de Roma, al Vaticano.
Ratzinger, de 86 años, se aloja en el palacio apostólico de Castel Gandolfo desde el pasado 28 de febrero, día de su renuncia al papado.
Vive con su secretario particular y Prefecto de la Casa Pontificia, el arzobispo Georg Ganswein, y la “Familia Pontificia”, como es conocido el reducido grupo que cuida al papa emérito.
De la “Familia Pontificia” forman parte además de Ganswein, las cuatro laicas consagradas de la comunidad “Memores Domini” y un diácono belga.
Benedicto XVI se trasladará con toda la “familia pontificia” al monasterio vaticano, donde también está ya dispuesta una habitación para cuando venga a verlo su hermano Georg, también sacerdote, de 89 años, que vive en Alemania.
Cuando anunció su renuncia, Benedicto XVI dijo que permanecería “oculto para el mundo”, rezando por la Iglesia.
El monasterio “Mater Ecclesiae” se encuentra a pocos metros de la residencia de Santa Marta, donde se aloja el papa Francisco, por lo que, según las mismas fuentes, no hay que descartar que mantengan “frecuentes y discretos contactos”.
A los dos papas les gusta pasear por los jardines vaticanos y rezar en la capilla que se levanta en la copia de la Gruta de Lourdes construida en los jardines. Para llegar hasta el lugar desde la residencia de Santa Marta hay que pasar por el monasterio donde se alojará Benedicto XVI.
El pasado 23 de marzo, Francisco viajó a Castel Gandolfo para saludar y almorzar con Benedicto XVI, con quien ha hablado en numerosas ocasiones por teléfono desde que fue elegido pontífice. EFE