El balance por el derrumbe en Bangladesh de un edificio donde funcionaban talleres de la industria textil se elevaba este domingo a 610 muertos, después de que decenas de cuerpos fueran extraídos de la montaña de escombros, informó una fuente militar.
“El saldo de muertos confirmados asciende ahora a 610 muertos”, dijo a la AFP el teniente Imran Khan, miembro del equipo responsable de las tareas de rescate. Se trata de la peor catástrofe industrial en el país.
El Rana Plaza, de ocho pisos y ubicado en Sevar, en las afueras de la capital del país Dacca, colapsó el pasado 24 de abril cuando unos 3.000 obreros de la industria del textil trabajaban en cinco talleres de confección diferentes.
Según las autoridades, 2.437 personas pudieron ser salvadas.
Los esfuerzos de identificación son difíciles debido al estado de los cuerpos de las víctimas, a menudo en estado de descomposición avanzada o mutilados, informaron las autoridades.
“Hemos identificado sólo a un puñado de ellos, gracias a teléfonos móviles en sus bolsillo o a tarjetas de identificación de empleado del taller”, explicó a la AFP el administrador adjunto del distrito de Dacca, Zillur Rahman Chowdhury.
El fuerte olor a descomposición sugiere que aún hay cuerpos de víctimas debajo de los escombros.
Según un responsable de la investigación, las vibraciones provocadas principalmente por cuatro enormes generadores de electricidad instalados en los pisos superiores del edificio provocaron el desastre.
Además, según el arquitecto del edificio, Masood Reza, el inmueble no fue diseñado para soportar el peso de toda la maquinaria y los generadores instalados en las fábricas de prendas de vestir, sino para albergar oficinas o centros comerciales.
La policía de Bangladesh arrestó a 12 personas, incluyendo al propietario del edificio y cuatro personas responsables por las fábricas, por haber forzado a los empleados a continuar trabajando, a pesar de las rajaduras que aparecieron en el inmueble el día anterior al derrumbe.
La tragedia ocurrió cinco meses después que un incendio provocó la muerte de 111 personas en otra fábrica textil.
AFP