La organización Amnistía Internacional (AI) subrayó hoy que el exdictador argentino Jorge Rafael Videla, que falleció en una cárcel de Buenos Aires a los 87 años, “no escapó a la justicia”.
Videla “ha muerto en prisión, donde cumplía sentencia por crímenes contra la humanidad”, destacó AI en un comunicado, en el que recordó que en noviembre de 1976 envió a sus primeros investigadores para evaluar las denuncias sobre violaciones de derechos humanos en Argentina.
El ex dictador fue condenado en 2010 a prisión perpetua por delitos de lesa humanidad.
Además, el año pasado un tribunal le condenó a 50 años de cárcel por el plan sistemático de robo de bebés que eran hijos de perseguidos o desaparecidos, mientras seguía en curso un juicio por su participación en el Plan Condor, una operación para perseguir y hacer desaparecer a opositores políticos en Latinoamérica.
“Argentina lideró el camino para perseguir a los responsables de la tortura, el asesinato y la desaparición de miles de personas durante los gobiernos militares en toda Latinoamérica”, señaló Mariel Belski, responsable de la organización en Buenos Aires.
Amnistía urgió a los países de la región a “continuar con los esfuerzos para llevar ante la justicia a los responsables de los terribles crímenes cometidos durante le época más oscura” del continente.
“Desde que Videla llegó al poder, AI recibió denuncias sobre violaciones de derechos humanos y, en noviembre de 1976, envió una misión de investigación a Argentina. El resultado fue un informe detallando sobre detenciones sin orden judicial y torturas”, recordó hoy la organización.
Videla lideró el golpe de marzo de 1976 y encabezó hasta 1981 una Junta militar que, según las organizaciones pro derechos humanos argentinas, secuestró, torturó e hizo desaparecer al menos a 30.000 personas. EFE