La oposición venezolana denunció este viernes un retraso injustificado del Supremo para responder a las impugnaciones de los comicios presidenciales de abril pasado, cuyos resultados son sometidos por el Poder Electoral a una auditoría que hasta ahora ha confirmado “cero error” en el proceso automatizado de votación.
El oficialista Nicolás Maduro ganó los comicios por un margen de 1,49 % de los votos, resultado que su principal contendiente, el opositor Henrique Capriles, no ha reconocido y ha impugnado ante el Tribunal Supremo de Justicia por considerarlo fraudulento.
Capriles y la alianza opositora Mesa de la Unidad Democrática presentaron el 2 y 7 mayo pasados, respectivamente, las impugnaciones al proceso electoral y el Supremo debía responder si las aceptaba o no en “dos días hábiles” porque así lo establece la ley orgánica que rige al Poder Judicial.
“Ya va más de una semana” sin respuesta, añadió en declaraciones este viernes a Efe Ramón José Medina, integrante de la Mesa, que aglutina a partidos de oposición.
Medina explicó que el Supremo se ha excusado aludiendo que antes de decidir sobre las impugnaciones debe resolver las recusaciones contra tres magistrados del Supremo también presentadas por la oposición, algo que el miembro de la alianza tildó de injustificado porque se trata de dos procesos distintos.
La oposición recusó a los magistrados Jhannett Madriz y Malaquías Gil por su filiación política con el gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), lo que los magistrados han negado con el argumento de que renunciaron a la militancia en el partido fundado por el fallecido presidente Hugo Chávez, según ha informado la prensa local.
Los adversarios del oficialismo también recusaron al magistrado Fernando Vegas, el encargado de estudiar los recursos presentados por Capriles y por la MUD.
Capriles impugnó el 55,4 % de los 15 millones de votos emitidos en abril y pide la repetición total proceso, mientras que la MUD, por su parte, cuestiona 2,32 millones de votos y pide que se vuelva a celebrar parcialmente la elección.
“El país espera que se inhiba” Vegas, presidente de la Sala Electoral del Supremo, porque “es compadre” del ministro del Interior, Miguel Rodríguez, y “es cuñado” del viceministro Marcos Rojas, escribió este viernes Capriles en Twitter.
Por ese parentesco, el también gobernador del estado de Miranda prevé que Vegas negará los dos recursos de impugnación de los comicios de abril pasado, convocados para elegir al presidente que culminaría el período 2013-2019, iniciado por Chávez.
“Si se declara inadmisible la impugnación acudiremos a las instancias internacionales”, afirmó Medina a Efe sin más precisiones.
El Consejo Nacional Electoral (CNE) inició este viernes la tercera y última fase de la auditoría del 100 % de los votos emitidos el pasado abril, un proceso iniciado el pasado día 6 y que culminará en junio según los datos oficiales.
La segunda fase de la llamada “verificación ciudadana” culminó el jueves y arrojó una coincidencia de 99,98 %, es decir, “cero error” en el sistema automatizado de votos, afirmó la vicepresidenta del CNE, Sandra Oblitas.
La primera fase de la auditoría se cumplió el mismo día de los comicios con la verificación del 66,3 % de las mesas electorales, un 12,3 % de los establecido en la ley electoral, añadió Oblitas.
“Lo dijimos hace varios días,lo reiteramos,la supuesta auditoría que hacen unos Rectores CNE es una farsa!Una mamarrachada!”, escribió el jueves Capriles en Twitter.
Fue Capriles quien exigió la verificación del 100 % de los votos, pero la oposición no participa en el proceso porque no incluye la auditoría de los cuadernos electorales, en los que aparecen las firmas y huellas de los votantes y donde estarían las supuestas irregularidades que dieron el triunfo a Maduro, según el excandidato opositor. EFE