Al menos 91 personas murieron por un potente tornado con vientos de hasta 320 km/h que azotó el lunes las afueras de Oklahoma City (Oklahoma, sur), destruyendo a su paso centenares de edificios, entre ellos dos escuelas, informaron medios de comunicación estadounidenses.
La gobernadora del estado de Oklahoma, Mary Fallin, dijo a la prensa que el tornado, que afectó principalmente a la localidad de Moore, de 55.000 habitantes, también provocó “un gran número de heridos”.
Fotos AFP