Al menos 91 personas, entre ellas 20 niños, murieron en un tornado con vientos de hasta 320 km/h que azotó el lunes las afueras de Oklahoma City, capital del estado de Oklahoma (sur), destruyendo a su paso centenares de edificios y dos escuelas.
El presidente estadounidense Barack Obama declaró el estado de desastre en el área, lo que abre la vía a ayudas federales para las zonas devastadas en los condados de Cleveland, Lincoln, McClain, Oklahoma y Pottawatomie, indicó la Casa Blanca en un comunicado.
El pasaje del tornado que asoló a Moore, una ciudad de 55.000 habitantes en las afueras de Oklahoma City, dejó probablemtne 91 muertos, dijo Amy Elliott, funcionaria de la oficina forense estatal, citada por CNN.
Elliott dijo a la AFP que la mayoría de los niños fallecidos tenía menos de 12 años.
El servicio meteorológico nacional calificó la fuerza del tornado como EF-4 en la escala de magnitud de estos fenómenos, lo que supone vientos que van desde los 260 hasta los 320 km/h.
“Sabemos que hay un gran número de heridos. Sabemos que hemos perdido muchísimas infraestructuras en esta comunidad y en todo el estado”, dijo a la prensa la gobernadora de Oklahoma, Mary Fallin.
El jefe de policía de Moore, Jerry Sillings, dijo que “la búsqueda (de personas entre los escombros) siguió toda la noche”.
Sillings había pedido a los habitantes abandonar la zona. “Hay muchas medidas de seguridad, tuberías de gas, cableado eléctrico que debemos revisar, pero no se puede hacer mucho a esta hora”, había señalado en alusión a la dificultad de trabajar en la oscuridad de la noche.
Los problemas de energía agravaban la situación. En torno a 35.000 habitantes de Moore carecían de gas y electricidad en la mañana del martes, señaló la compañía OG&E.
Según CNN, al menos 145 personas fueron hospitalizadas. Reporteros de la cadena de televisión local KFOR vieron cómo sacaban de entre los escombros de la escuela primaria Plaza Towers a niños de unos 9 años.
Los angustiados padres, mantenidos alejados por los equipos de emergencia, se agrupaban el lunes cerca de los escombros, según los medios locales, que mostraban decenas de socorristas buscando entre los restos.
El tornado también afectó la escuela primaria Briarwood de la localidad.
Un alumno de sexto año llamado Brady relató a CNN como él y sus compañeros se guarecieron en los baños de los docentes, siendo luego evacuados rápidamente debido a una probable fuga de gas.
El centro médico de Moore fue evacuado, según un portavoz entrevistado por la cadena News9, y todos los pacientes fueron trasladados a otros hospitales.
Según el canal KFOR, cuatro integrantes de una familia murieron en un congelador en el que se habían refugiado.
Jolly Joe, un residente de Moore, dijo a la Radio Pública Nacional que su barrio parecía una “zona de guerra”. “Prácticamente no tengo casa”, afirmó. “Todavía estoy en shock. Fue intenso, no sé qué decir, era terrible”, relató.
Las cadenas locales mostraron imágenes aéreas de decenas de hectáreas de casas completamente destruidas, paredes derrumbadas y gente caminando entre los escombros.
Sirenas en Oklahoma City
Un poco más al norte, en Oklahoma City, las sirenas de alerta por tornados se activaron al menos tres veces y la carretera 35, una autopista muy transitada que atraviesa el estado de norte a sur, quedó cerrada al tránsito y reservada únicamente para los vehículos de emergencia.
El alcalde de Oklahoma City, Mick Cornett, dijo a CNN que los primeros equipos de emergencia “han sido desplegados” y que “el Estado y la Guardia Nacional se involucrarán” en las tareas de rescate.
Según la cadena News9 se instalaron refugios de emergencia en la ciudad, en especial en las iglesias.
“No tenía idea de que llegaba” el tornado, dijo al canal KFOR Lando Hyde, el empleado de un establo de un suburbio de la ciudad. Lo primero que hizo fue liberar los caballos y luego buscó refugio en el establo. “Era terriblemente ruidoso y se podían ver las cosas volando por todas partes”, explicó.
Los tornados suelen afectar las planicies de Oklahoma, situadas en el llamado “Corredor de Tornados”, pero rara vez alcanzan zonas habitadas como este lunes.
El domingo, nubes en forma de embudo fueron observadas en ciudades como Edmond y Shawnee, también en Oklahoma.
En Shawnee un tornado alcanzó un grupo de casas prefabricadas, dejando al menos un muerto, según Fox TV.
El domingo fue declarado el estado de emergencia en 16 condados del estado.
El jueves pasado 10 tornados golpearon el vecino estado de Texas, dejando al menos seis muertos y decenas de heridos.
La localidad de Moore ya había sido destruida en parte en mayo de 1999, cuando un potente tornado mató a 41 personas. AFP