Carniceros argumentan que los altos precios con los que adquieren la carne y el pollo, les impide vender estos productos de acuerdo a la regulación que estableció el Gobierno nacional. Producto de esta situación, en cualquier comercio del ramo, difícilmente alguna persona puede comprar la carne por debajo de 80 bolívares y el pollo en menos de 40 bolívares el kilo, así lo publicó El Carabobeño.
El corte de carne de primera denominado solomo, es ofrecido al público en 110 bolívares, el muchacho en 92 y la de guisar en 85, a pesar de que tradicionalmente esta era la más barata.
Los comerciantes argumentan que todos los insumos para que funcione el negocio han subido de precio, a lo que agregan que tienen que pagar alquiler de local, electricidad y personal. Además a las reses en canal no se les saca provecho económico a los huesos ni a la grasa que traen. Citan por ejemplo que el paquete de bolsas de plástico que costaba 200 bolívares, subió a 500. Y el envoplas que costaba 380 bolívares, ahora está en 500.
Pollo y carne regulada
En el único supermercado que se pueden encontrar la carne y el pollo a precio regulado (27 y 18 bolívares, respectivamente) es en el Popular de La Candelaria.