Con una mirada que parece humana, el tímido mono Lesula(Cercopithecus lomamiensis) puede ser considerado sin duda alguna el animal más sorprendente descubierto en el último año. Habita en los bosques tropicales del centro de la República Democrática del Congo, se mueve tanto en el suelo como en los árboles y sobrevive gracias a una dieta que contiene vegetación herbácea terrestre. Más fácil de escuchar que de ser vistos, estos monos organizan un coro durante el amanecer. Los machos adultos tienen un gran parche desnudo en la piel de las nalgas, los testículos y el perineo, que se colorean de un azul brillante. Aunque los bosques donde viven son remotos, la especie es cazada por los nativos y su estado de conservación es vulnerable. Se trata de la segunda especie de un mono africano hallado en los últimos 28 años, reseña ABC de España.
El entomólogo Shaun Winterton, del Departamento de Agricultura y Alimentación de California, pasaba el rato mirando unas fotos de insectos subidas a Flickr, un famoso sitio web para compartir imágenes, cuando algo le llamó la atención. Se trataba de una crisopa verde, un insecto ya conocido, pero con un aspecto distinto, de cuento de hadas. El cuerpo de la criatura tenía una red de finas líneas negras y unas motas azules que nunca antes había visto. Había encontrado, nada menos, que una nueva y preciosa especie. LaSemachrysa jade habita en la selva tropical de Malasia. El patrón de las alas, con líneas negras y manchas azules, es su características más distintiva.
La luminiscencia entre los animales terrestres es bastante rara, aunque se produce entre las luciérnagas y ciertos escarabajos, así como en los mosquitos del hongo que habitan en cuevas. Desde el primer descubrimiento de una cucaracha luminiscente en 1999, más de una docena de especies han salido, nunca mejor dicho, a la luz. Curiosamente, solo en encuentran en áreas remotas lejos de la contaminación lumínica. El último ejemplar que se suma a la lista es esta cucaracha de Ecuador (Lucihormetica luckae), en peligro de extinción o posiblemente quizás ya extinguida. De esta especie se conoce un solo ejemplar recogido hace 70 años en una zona gravemente afectada por la erupción del volcán Tungurahua. El tamaño y la ubicación de sus lámparas sugieren que utiliza la luz para imitar a los escarabajos tóxicos.
Toda una delicadeza. Esta violeta liliputiense, una de las dicotiledóneas terrestres más diminutas, ha aparecido solo en una localidad en una meseta entre las montañas de los Andes del Perú. Las muestras se recogieron por primera vez en la década de los 60, pero la especie no fue descrita como nueva hasta 2012. Apenas se eleva un centímetro del suelo. Su nombre, Viola lilliputana, proviene, obviamente, de los pequeños habitantes de la isla de Lilliput en «Los viajes de Gulliver» de Jonathan Swift.
Esta hermosa nueva especie de serpiente comecaracoles llamada Sibon noalamina fue descubierta en los bosques tropicales de las tierras altas del oeste de Panamá. La serpiente es nocturna y caza presas de cuerpo blando como las lombrices de tierra y los huevos de anfibios, además de caracoles y babosas. Es inofensiva, y para que la dejen en paz imita los anillos de las serpientes corales venenosas. La especie se encuentra en la Serranía de Tabasará, donde existe un yacimento de extracción de mineral que pone en peligro su hábitat. Por eso, el nombre de la especie se deriva de la frase en español «No a la mina».
Esta rana minúscula (Paedophryne amanuense) es el vertebrado vivo -animales que tienen columna vertebral o espina dorsal- más pequeño del mundo. Mide tan solo 7 milímetros, y le ha robado el título a euna specie de pez ciprínido del sudeste asiático. En el extremo puesto del grupo se encuentra la ballena azul, que mide 25,8 metros. La nueva rana fue descubierta cerca de la localidad de Amau en Papúa, Nueva Guinea. El tamaño de la rana adulta, determinado por el promedio de las longitudes de machos y hembras, es de solo 7,7 milímetros. Con pocas excepciones, esta rana ultrapequeña y otras especies similares habitan la hojarasca de los bosques tropicales húmedos.
El nuevo arbusto Eugenia petrikensis crece hasta dos metros y tiene un particular color verde esmeralda, un follaje ligeramente brillante y hermoso, y densos racimos de pequeñas flores de color magenta. Es una de las siete nuevas especies descritas en el bosque litoral del este de Madagascar y se considera en peligro de extinción. Es la evidencia más reciente de las especies únicas y numerosas que se encuentran en este bosque húmedo que crece sobre el sustrato arenoso a kilómetros de la costa. El bosque litoral se ha reducido a fragmentos aislados bajo la presión de las poblaciones humanas.
Esta espectacular esponja carnívora con forma de arpa o lira ha sido descubierta en aguas profundas (3.399 metros) bajo el Océano Pacífico, al noreste de la costa de California. Las estructuras con forma de arpa van de dos a seis, y cada una tiene más de 20 ramas verticales paralelas, a menudo coronadas por una especie de bola. Esta forma inusual maximiza el área de superficie de la esponja para el contacto y la captura de presas planctónicas. Su nombre científico es Chondrocladia lyra.
En 2001, las manchas negras comenzaron a aparecer en las paredes de la cueva de Lascaux en Francia. Seis años después, las manchas eran tan frecuentes que se transformaron en una preocupación importante para la conservación del precioso arte rupestre del lugar, que se remonta al Paleolítico Superior. Un brote de un hongo blanco, Fusarium solani, había sido tratado con éxito cuando solo unos meses más tarde, los hongos negros aparecieron. El género Ochroconis incluye principalmente hongos que se producen en el suelo y están asociados con la descomposición de la materia vegetal. Por lo que saben los científicos, este hongo, una de las dos nuevas especies del género de Lascaux, es inofensivo. Sin embargo, al menos una especie del grupo puede enfermar a las personas con sistemas inmunes delicados.
La Juracimbrophlebia ginkgofolia es una mosca de hace 165 millones de años -lo que ahora se ha descubierto en China es su fósil- que se mimetiza perfectamente con el árbol ginkgo. Escondida debajo del follaje, captura a otros insectos como alimento. Se caracteriza por sus cuerpo flaco, dos pares de alas estrechas y sus patas largas como hilos. Es un raro ejemplo de un insecto imitador de un vegetal antes de que aparecieran las plantas con flores.