Son innumerables los avances para ejercitarse con glamour.
Pensar que alguna vez una mujer tuvo que demostrar que también “Nosotras corremos” puede parecer absurdo en estos días donde la fiebre por ejercitarse y estar en forma ha hecho que muchas se sumen a recorrer calles ya sea en su tiempo libre o en carreras organizadas por diversas marcas y empresas, haciendo del running una moda tanto para hombres como para mujeres.
Sin embargo, hubo un tiempo cuando se nos tenía prohibido a las chicas participar en maratones por ser considerada una actividad exclusiva para ellos; tuvimos que esperar la valentía de Kathy Switzer en 1967.
Con tan solo 20 años esta jovencita se inscribió en la 70ª edición del maratón de Boston. Omitió su nombre en la planilla de registro usando simplemente sus iniciales K. Switzer, así fue admitida sin causar mayor sospecha. Llegado el día, Kathy quien había entrenado duramente semanas antes, fue descubierta en competición; uno de los directores trató de sacarla de la vía pero fue protegida por su entrenador y novio que iban junto a ella, sin embargo, aquellas imágenes de un hombre de traje tratando de evitar que aquella chica corriera, le dieron la vuelta al mundo y las manifestaciones no se hicieron esperar. ¿Su tiempo? 4 horas 20 minutos y cinco años para lograr que el Maratón de Boston creara una categoría femenina.
Sin duda mucho hay que agradecerle a Kathy Switzer, pero también a la marca Nike con sus innumerables avances en la manufactura de prendas para lucir increíble al tanto que confortable mientras realizas actividades deportivas. Valió la ocasión del lanzamiento del zapato Free Run 5.0 para llevar a cabo hoy 19 de mayo la carrera “Nosotras Corremos”.
Este calzado posee las características idóneas para entrenamientos diarios y distancias cortas, son muy flexibles por la forma de suela y el material con el que se han diseñado, además de ser muy livianos. Sin embargo, lo que más engancha de la línea Free Run es la gama cromática y las combinaciones de color en los que están hechos. A muchas les pasará lo que a mí, que ya encontré el modo de llevarlas casualmente más allá de un día de training (entrenamiento) sin lucir informal, reemplazando ballerinas y porqué no admitirlo, los tortuosos tacones.
Con información de revistadominical.com.ve