La temporada de vacaciones escolares es la más larga e importante para todos los destinos de vocación turística del país. A empresarios y comerciantes de Margarita les preocupa que vence el plazo para surtir sus inventarios de mercancía nueva y garantizar el éxito de la zafra, publica El Nacional.
DEXCY GUÉDEZ
@dexcyguedez PORLAMAR
Teodoro Bellorín, presidente de la Cámara de Comercio, Puerto Libre y Producción de Nueva Esparta, asegura que existe una gran preocupación debido a que en la mayoría de los casos la demora en la entrega de las divisas para las importaciones supera los nueve meses.
“Se acorta el tiempo y el sector importador de la isla sigue sin obtener respuestas sobre las solicitudes de divisas para comprar en el exterior la mercancía para la demanda en vacaciones escolares”, destacó Bellorín, quien aseguró que recurrieron a las autoridades de Cadivi para exigirle celeridad en el otorgamiento de las divisas. Aún no han obtenido respuestas.
Bellorín alertó que el tope máximo para poder hacer los pedidos sería el 15 de junio, puesto que, de lo contrario, se corre el riesgo de no poder reponer las existencias de mercancías.
Destacó que los importadores y comerciantes se sienten ahogados por los retrasos en la entrega de divisas, lo que poco a poco viene haciendo desaparecer el atractivo comercial que antes representaba el puerto libre debido a la competitividad de precios con el resto del país y otras islas del Caribe.
Cambio de ramo. La escasez de dólares ha obligado a muchos pequeños comerciantes a cambiar de ramo para poder mantener los locales abiertos con la misma denominación y ahorrar gastos en documentación.
Amalia González tenía una venta de celulares y otros artículos electrónicos, pero las dificultades para adquirir la mercancía la obligó a comercializar bisutería, trajes de baños y tarjetas telefónicas.
“En este tipo de negocios, por pequeños que sean, se necesitan dólares. Eso es casi que la materia prima”, recalcó.
Yusef Mansur tenía un bodegón en la zona comercial de Porlamar y ante la imposibilidad de comprar licores y delicateses decidió vender pan árabe y otros víveres que le están suministrando algunos paisanos para que siga activo y pueda mantener a su familia.
“Gracias a Dios puedo contar con la ayuda de algunos paisanos para poder mantener el negocio abierto. Otros no corren con la misma suerte”, enfatizó.
Julio Boada, encargado de una tienda del casco comercial de Porlamar, manifestó que la situación de los inventarios es bastante delicada porque están muy bajos y las posibilidades de reponerlos son muy escasas.
“Ya comienza a preocuparnos porque el tiempo transcurre y la asignación de las divisas no se hace de manera inmediata como merece el régimen de puerto libre”, subrayó.
Vicente Gerardi, representante de una de las principales cadenas de supermercados de Margarita, aseguró que lo más preocupante de la situación que afrontan por falta de dólares es que se acorta la diferencia de precios con tierra firme, al tiempo que se reducen las ganancias y las posibilidades de rotar la mercancía.
Dijo que las restricciones de divisas han causado un serio impacto en los stocks, ya que han desaparecido rubros que tradicionalmente han sido muy demandados como el llamado “queso de bola”.
Afirmó que el queso amarillo holandés se encuentra desaparecido del mercado, situación que les preocupa pues durante la temporada de vacaciones escolares es muy demandado.
Para Jesús Irausquín, presidente regional de Fedecámaras, la situación evidencia la falta de interés político por atender las peticiones de los empresarios insulares, ya que la demanda para Margarita, apenas es menos de 3% de las asignaciones para el territorio nacional.
La asignación de 1 millardo de dólares anuales garantizaría totalmente las importaciones para atender la demanda de las islas de Margarita y Coche, incluido alimentos y medicinas.
Puerto paralizado. Enrique Rondón, presidente de la Cámara de Aduaneros de la entidad, reiteró que el puerto de El Guamache se encuentra prácticamente paralizado porque no hay importaciones.
Aseveró que desde el año pasado el volumen de las importaciones no llega a 10% y refirió que los comerciantes que han podido adquirir mercancía, lo han hecho con dólar libre, lo que significa que al llegar los productos al consumidor, los precios son más elevados porque tiene que pagar todos los costos de trámites.
Rondón coincide en que debe sincerarse el número de licencias de puerto libre para facilitar al Gobierno el otorgamiento de las divisas.
“Esa es la única forma de acabar con las empresas de maletín que vienen de tierra firme a llevarse los dólares que corresponden a los importadores que verdaderamente son de Margarita. Hay que poner coto a esa práctica deshonesta”, afirmó.