El diputado Ismael García está tranquilo, pese a las amenazas que ha recibido, tras ser el vocero de la presentación del audio en el cual el ex conductor del programa “La Hojilla”, Mario Silva, deja en evidencia una cantidad de hechos de corrupción, intrigas y lucha de poder entre personajes del Gobierno que van desde el presidente de la Asamblea Nacional (AN) hasta el mismísimo jefe de Estado, Nicolás Maduro, pasando por diputados, el ministro de la Defensa y gente muy cercana al fallecido mandatario Hugo Chávez. Sobre su separación “forzada” -o sea, impuesta por la nueva directiva de Globovisión- del programa “Aló, Venezuela”, que se transmite por ese canal todos los domingos, dice que no es el momento; que no quiere hablar, por ahora.
Janet Yucra M./Notitarde
Para el parlamentario, las confesiones de Silva, ante un funcionario castrense cubano, son la demostración de todas las denuncias que durante 14 años de vigencia del chavismo se hicieron desde la oposición, sobre todo las que tienen que ver con la corrupción y el manejo del dinero de la nación, para provecho personal, dejando de lado la cantidad de problemas que aquejan a los venezolanos y que se han agravado en los pocos meses que Maduro y su entorno llevan frente al Gobierno.
García sostiene que, luego de conocer el contenido de la grabación, se entienden las razones por las cuales el diputado Diosdado Cabello causó la crisis en la AN y que no son otras sino perjudicar la administración Maduro que comenzó con muy mal pie.
Esta crisis, unida al padecimiento de los ciudadanos, principalmente de los más necesitados, además de que la corrupción ya no se puede ocultar, hace pensar a García que “el juicio popular” llegará para el Gobierno y que “tarde o temprano” lo sacará del poder, “porque la gente está cansada”.
Para conversar sobre este polémico material que la Mesa de la Unidad sacó a la luz pública, nos reunimos con el parlamentario en las oficinas de Avanzada Progresista, Lisandro Casaña, reportero gráfico, y quien suscribe. Por cierto que el diputado aclaró que la denuncia o el material grabado le llegó a la oposición y que él actuó como vocero, así como lo han hecho otros dirigentes de la oposición, entre ellos su colega de la Causa R, Andrés Velásquez.
– ¿Por qué esperaron hasta este momento para presentar el audio?
– Por lo que se escucha en la conversación, esto fue grabado pocos días después de las elecciones y desde ese momento no ha pasado tanto tiempo.
Lo dimos a conocer luego de hacer nuestras propias investigaciones, porque antes de presentar algo de este calibre, fue necesario revisar con equipos técnicos la voz de la persona, compararla. Tuvimos que asegurarnos de que se trataba de Mario Silva, porque la voz de una persona es como una huella digital, puedes imitarla, pero jamás será la misma; su registro, en cuanto a sonidos se refiere, es único. Es un conjunto de cosas serias y responsables que se tienen que hacer antes, para corroborar, sin tocar el audio, sin editarlo, sin quitarle ni agregarle nada. El audio fue presentado tal como fue grabado por el propio Mario Silva.
– Pero desde el Gobierno dicen que es un montaje.
– Eso nos da la razón. Ellos no han negado que sea la voz de Mario Silva, dicen que es un montaje, pero no niegan que sea su voz.
Es imposible cambiarla. Él tampoco niega que sea su voz.
– Si Mario Silva dice estar con la revolución, ¿cómo es que acusa a toda esa gente del Gobierno de hechos de corrupción tan graves?
– Precisamente, es lo que nosotros nos preguntamos y denunciamos. El audio, desde la A hasta la Z, revela cosas muy graves que tienen que ver con la corrupción que, en un país con algún nivel de seriedad, donde medio funcionen las instituciones, habría una situación muy grave, desde el punto de vista político, moral y de opinión pública que ameritaría una investigación seria y profunda.
Por ejemplo, el tema de la corrupción y el manejo de las divisas. El ministro Jorge Giordani, cuando fue a la Asamblea, dijo que aquí se habían perdido más de 20 mil millones de dólares en empresas fantasma que solicitaban divisas para hacer importaciones y que muchas de ellas eran contenedores que llegaban al país llenos de piedras. Pues en ese audio, Mario Silva dice que tanto Diosdado como el ex director de la Disip, su amigo, desde Puerto Cabello hacían inmensos negocios con empresas fantasma, para traer grandes cantidades de dólares al país que luego se blanquearon.
Allí se produjo una estafa a la nación. Mientras tanto, aquí no hay ni papel higiénico en las estanterías de los abastos. Es algo muy grave.
Se habla de que José Vicente Rangel, quien es un hombre que se pone trajes caros para hacer un programa los domingos y aparece como la conciencia de este gobierno, aparece señalado como el gestor de obras y contratos, pero además como protector de personas que participaron en el golpe de abril de 2002 contra el presidente Chávez y que están en Pdvsa, porque son protegidas por JVR.
Allí se hacen señalamientos que tienen que ver con funcionarios de la FAN, con nombre y apellido, se habla de la promoción del 85 y se advierte que es peligroso que tome la Fuerza Armada.
En el tema electoral, hoy cuando después de unas elecciones hemos solicitado una auditoría que fue negada, Mario Silva pone en evidencia la credibilidad del CNE y señala que fue hackeado y que el hacker fue al canal 8 a hablar con él y que no lo quiso recibir, porque presume que era un hombre de Cabello. También habla de que hay que hacer una auditoría forense a las elecciones que es lo que nosotros hemos pedido. Él dice que hay que hacer esa auditoría, pero en secreto. ¿Cómo es eso de que hackearon el CNE por una hora? ¿Cómo es que no se le ha dicho eso al país? Son demasiadas cosas y todas muy peligrosas que deben ser investigadas.
– ¿Cómo explica que Mario Silva le rinda cuentas a un oficial castrense cubano?
– Ellos no han negado nada sobre el teniente coronel Aramís Palacios, quien es un funcionario de inteligencia y contrainteligencia del G2. Palacios estaba haciendo labores de contrainteligencia en la Casa Militar, iba al Fuerte Tiuna, tenía relaciones con oficiales venezolanos y cubanos. Estaba en Maiquetía con una fachada, aparecía como un enlace que recibía y despachaba pasajeros de aquí y allá. Y es un hombre de la entera confianza de los Castro. Esto quiere decir que un oficial extranjero está ejerciendo funciones dentro de un país que se supone que es soberano. Eso es un acto de traición a la patria, cometido por quien está haciendo el papel de sapo. Ése es el jefe del “Cartel de los sapos”, porque aquí en Venezuela la política está siendo manejada por mafias.
Si es verdad lo que se dice en el audio, repito, se comprueba lo que el pueblo sabía y decía en los actos del Presidente (Chávez), acerca de que el entorno del mandatario estaba lleno de personas incapaces e ineficientes que no le resolvían sus problemas. Bueno, se está demostrando no solamente esa incapacidad, sino que este Gobierno está estructurado por carteles, por una mafia que manejan Diosdado y Mario Silva. Este señor señala a diputados de la AN como ladrones y los llama “los vampiros”.
Estas cosas que Silva dice nos muestran que él informa al Gobierno de Cuba, allá lo procesan y luego vienen a Venezuela a ordenar. Como Cuba tiene aquí grandes intereses y vive de nuestro petróleo, quiere una cierta estabilidad en el Gobierno y por ello seguramente, tras escuchar los reportes de Silva, vienen y le dicen a Nicolás: “mira, cuídate de esto, no hagas aquello”. Pero esto no es lo único; seguramente los cubanos se reunirán por otro lado con gente cercana a Diosdado para saber qué piensa él. En todo caso, no somos un país soberano, sino tutelados por Cuba que hace lo que le da la gana con nosotros.
También se comprueba de dónde viene esa afirmación de Cabello, cuando dijo que el presidente Chávez frenaba las loqueras. Creo que no son tan locos, porque los locos comen otra cosa que no es comida y ellos no comen eso.
– ¿Fue Mario Silva quien grabó la conversación? ¿Es el Vladimiro Montesinos de Venezuela?
– Sí, él lo confiesa al final, cuando le dice a Palacios que va a hacer una copia de la grabación para que se la lleve. De paso, este caso es más grave que el de Montesinos, e incluso que el Watergate. Este “Hojillagate” es más complicado, porque se involucra a casi todos los poderes del Estado.
– Alberto Fujimori cayó como consecuencia del caso Montesinos. ¿Por qué en Venezuela no ocurre lo mismo?
– Porque estamos en una sociedad de cómplices, donde las instituciones están secuestradas.
Tan lejos del socialismo
Otra de las cosas que alarman a García sobre el contenido de la grabación es que en ningún momento se menciona a la gente y sus problemas y mucho menos se habla de la gravedad de los mismos, lo que reafirma su preocupación acerca de que “en el Gobierno están para hacer grandes negociados”. “En el audio, por ningún lado escuchas la palabra pueblo, por ningún lado escuchas la palabra socialismo. No se habla de cómo atender el problema de la inseguridad. Lo que se oye es cómo un grupo quiere dominar o actuar sobre los otros y cómo hacer para mantenerse en el poder. Para ese señor (Silva), lo que menos importa es solucionar los problemas del país, porque por allá al final dice: “Nicolás puede tener algunas buenas intenciones, ¡pero qué va, no va a poder! Incluso, por el camino que va, está listo para que le hagan un referéndum y lo saquen del Gobierno”.
La actuación de Cabello
no es casual
– ¿Qué le parece la reacción del Gobierno? ¿Pareciera que se han empeñado en atacar al mensajero?
– Tú lo has dicho. He visto muchas señales de nerviosismo, como las expresiones groseras e irresponsables del presidente de la Asamblea. Uno podría decir que se trata de un teniente que está allí y que piensa que puede manejar a todos como a la tropa, darles órdenes para que golpeen a los diputados, está bien. Pero no, creo que ese tipo ha estado en cargos importantes como en Conatel y en ministerios y no ha actuado de esa manera. Creo que sabe cuál es el papel que está jugando. Uno puede decir entonces que la profundización de la crisis en la Asamblea, si es cierto lo que dice Mario Silva, la causó Cabello a propósito para crearle una situación de crisis a Nicolás Maduro. Además de eso, la negativa a investigar es otra señal de nerviosismo porque el primer interesado en que se investigue debería ser Cabello, tiene los mecanismos y los instrumentos para hacerlo. Nosotros no estamos acusando a nadie. Me has escuchado decir: “si es verdad lo que se dice en el audio”. Ellos dicen que ahora nosotros le damos credibilidad a Mario Silva, y es verdad, nunca se la dimos. Pero, precisamente, ese señor no es cualquiera, es quien fusilaba moralmente al adversario del Gobierno. Además, fue escogido para candidato a gobernador en uno de los tres estados más importantes de Venezuela. Eso quiere decir que no es ningún atarantado a quien se le ocurren esas cosas, sino alguien que tiene una alta responsabilidad en el Psuv.
Por otro lado, tienes el lenguaje de Nicolás, lleno de insultos y agresiones. No, ellos no me están insultando a mí, ni me descalifican. Quien me puede juzgar es el pueblo que me conoce y que me ha dado responsabilidades. Nicolás no tiene calibre ni autoridad moral para descalificarme. En tal caso, no es un debate entre Nicolás Maduro e Ismael García, por eso no les respondí. Él es un presidente en condiciones de ilegitimidad y eso le preocupa. No soy persona de acomodarse para dejar una puerta abierta, por si acaso. Si Nicolás hubiera ganado las elecciones limpiamente, sin trampas, tengan la seguridad de que así a alguien no le gustara en la oposición, claramente lo hubiera dicho al país. Pero Nicolás es ilegítimo. Por otro lado, ¡qué casualidad que gran parte de los mencionados en el sonido se fueron a La Orchila, y que para lanzar un cohete reconstruido por los cubanos! ¿Qué sabe Cuba de cohetes? Si es así, entonces nos invaden con una china. No, se fueron para allá a lanzar un pote de humo. Si hasta estaba José Vicente Rangel que es “la mano que mece la cuna”, porque ahora tiene altos intereses en el Gobierno, su hijo es viceministro, que por cierto eso jamás lo había logrado con Chávez. Además, están ocurriendo cosas que con Chávez no hubieran pasado, como eso de que el Presidente le dio las casas a la gente y éste (Maduro) se las está cobrando. Así como el hecho de que están en libertad unos banqueros corruptos, entre ellos Fernández Berruecos y Arnee Chacón. Por otro lado, el presidente Chávez tenía un liderazgo, tomaba decisiones, buenas o malas, pero las tomaba. Lo que ahora pasa con estos señores es que no solamente funcionan como carteles, sino que no tienen un liderazgo y lo que hacen es tratar de repartirse el poder. Mientras tanto, actualmente, el liderazgo está de nuestro lado. Henrique Capriles es el líder de Venezuela, de todo el país, y tenemos un proyecto que define el cambio, el progreso, en el marco de la Constitución y que no es segregacionista ni excluyente. No en vano casi un millón de chavistas votó por Henrique el 14 de abril.
– ¿Se puede interpretar que quien filtró el sonido lo hizo para favorecer a Maduro y perjudicar a Cabello?
– Para nada. No puede salir beneficiado Maduro, si en el audio Mario Silva pone en tela de juicio la credibilidad del CNE y en consecuencia cuestiona la legitimidad de su elección. Estar frente a la jefatura del país, con un CNE como dice Mario Silva, es grave.
– ¿Cómo llegó el sonido a sus manos?
– Tú, como periodista, sabes que las fuentes deben protegerse.
– ¿Es verdad que vienen otras grabaciones? ¿Cuándo las presentarán?
– Hay denuncias muy graves que presentaremos en su momento. Lo único que te puedo decir es que hay gente del oficialismo que me está llamando para saber si la mencionan.
El juicio popular
A diferencia de otras oportunidades en que la oposición ha hecho denuncias contra el Gobierno, las consecuencias en la opinión pública, sobre todo entre los afectos al oficialismo, no han sido muchas, porque en primer lugar, se mantenía la idea de que el presidente Chávez no sabía, porque sus funcionarios no le decían nada. Sin embargo, en este caso, Ismael García piensa que a la gente se le ha caído el velo y está viendo la realidad de lo que ocurre en el país. “El juicio popular va a ser importante en esta etapa. Agarra el Metro, métete en un lugar a comer una empanada, móntate en un autobús. No hablemos del este de Caracas o de las urbanizaciones de la clase media de Valencia y escucharás lo que las personas comentan. La gente dice que eso se sabía, pero que nadie lo había dicho. Es que no lo dijimos nosotros, sino que fue una de las personas más emblemáticas del oficialismo quien puso todo al descubierto. Ese pote de humo que lanzaron en La Orchila no es nada en comparación con este misil que Mario Silva lanzó y cayó en las entrañas del pueblo, no para matar a nadie, sino para implosionar una situación tan grave que hay. Por eso actúan con tanta virulencia. Me descalifican diciendo que soy un loco, una basura, las palabras más horribles que pueda haber, dichas por alguien que efectivamente está demostrando que no tenía la talla ni la formación para ser presidente de la República. Busca en algún archivo, en algún vídeo, alguna descalificación del presidente Chávez hacia mí. Yo sí me senté con Chávez a discutir cosas y nunca se las he dicho a nadie, porque estaban en el marco de la Constitución. En esos momentos Nicolás no estaba en esas reuniones, porque era un sargentón (sic) de la política, no era jefe nacional como era yo. Él (Nicolás) se quejaba ante mí… primera vez que digo esto… de que Diosdado lo perseguía con la Disip. La historia se encargará de decir si él es un hombre honorable, pero está demostrando que no tiene la talla para estar en Miraflores.
Lo que te quiero decir es que la gente ya juzgó esto y el Gobierno cree que la victoria se logró en las elecciones. No, las victorias finales no se logran el día de las votaciones. No hay victorias electorales, sino victorias políticas de la sociedad que se concretan el día de los comicios. Por eso tanta gente votó por Capriles en abril, repito, porque ya no había confianza en un allegado del círculo del presidente Chávez”.
– ¿A Maduro le importa la gente?
– Ya no le importa la popularidad. En estos días Nicolás dijo que le saben a chicle las encuestas. Vamos a ver si es verdad, porque vienen otras elecciones. Con intimidación y amenazas no van a lograr nada. El país sabe que si me pica un mosquito en este momento, los responsables son el Gobierno y Nicolás Maduro Moros.
– ¿Cuál será el destino de Mario Silva?
– No sé. Ellos están actuando como en un territorio sin ley, están haciendo lo que les da la gana.
– ¿Si eso ocurre en el oficialismo, quiere decir que las grietas que hay en éste son irreparables?
– En los tiempos finales de esta película ocurren esas cosas. En los tiempos finales de un modelo autoritario ocurre como cuando un hombre le pega a una mujer. Llega un momento en que ella se cansa y se va. Aquí se está produciendo un divorcio de un pueblo gigantesco que creyó, que aspira desde hace años a que haya justicia social y que sus problemas elementales se resuelvan. La gente espera salir a la calle y estar tranquila, quiere ir a un hospital y encontrar medicinas o un cupo en una escuela para sus hijos. Los jóvenes aspiran a trabajar, tener una casa y un carro, pero sin necesidad de ponerse un trapo de un color para ganarse eso. Para ellos es necesaria la inversión privada, para que haya empleos de calidad. La gente ya está cansada.
– ¿Pero qué pasará, si Maduro es presidente, porque hasta ahora las instituciones no han dicho lo contrario, los poderes están de lado del Gobierno y mientras tanto, los problemas del país siguen intactos?
– Nosotros vamos adonde la historia de este pueblo nos lleve. Yo aspiro a que todo lo que ocurra en este país sea en el marco de la Constitución y las leyes, que no haya violencia y que no se cierren todos los caminos. Porque un ciudadano va a la Fiscalía, al TSJ, y no consigue respuestas; eso va creando una gran frustración. No te hablo de los casos políticos, sino de cualquier circunstancia que requiere justicia. Si van cerrando todos los caminos, eso va a implosionar en algún momento. Ojalá Dios quiera que la sensatez prevalezca. Si alguna cosa necesita este país en este momento es diálogo sincero, entre iguales. No eso que te llaman a dialogar, pero con una pistola en la mano. El Gobierno sabe que necesita sentarse con los sectores productivos del país, para salir adelante. Ésta no es una lucha del Gobierno contra la oposición. Están acorralando la sociedad y llega un momento en que no da para más. Una revolución moderna no es de un solo sector de la sociedad. No es armar a un pueblo. ¿Quién puede decir que un Sadam Hussein pueda volver a gobernar? Los modelos hegemónicos se acaban.