El responsable de Voluntad Popular en el estado Barinas, Freddy Superlano, durante un recorrido por el municipio Arismendi, ubicado en el extremo este de la entidad llanera, constató “la dramática situación de abandono oficial en la que viven sus habitantes, que tienen que soportar hasta 13 cortes de luz diarios, la falta de un servicio de agua potable y las consecuencias económicas de vías intransitables”.
Movilizándose en embarcaciones típicas de la región, a través de caños y ríos, Superlano, acompañado de activistas y dirigentes de la tolda naranja y otras organizaciones políticas y sociales de la Unidad Democrática, evidenció también el alto nivel de aislamiento en el que se encuentra la localidad, cuya vía de conexión con la capital Barinas “se quedó en promesas desde los tiempos de Hugo de los Reyes Chávez (gobernador de la entidad de 1998 a 2008). Esto dificulta la producción de carne y queso, de la cual viven principalmente sus habitantes”, denunció.
Posteriormente, durante una asamblea popular en la parroquia La Unión, el dirigente regional de VPA encabezó la juramentación del equipo de la tolda naranja en la circunscripción, cuestión que consideró un gran avance para que “Arismendi deje de ser la cenicienta a la que todos los viejos políticos y gobernantes de Barinas han prometido de todo para que voten por ellos, pero que finalmente le pagan con mentiras”.
Planteó a los vecinos de la comunidad mantenerse en pie de lucha ante la nueva realidad política del país, “que le abre el camino a los factores de la alternativa democrática, para seguir avanzando en la construcción de una mejor Barinas y una mejor Venezuela”.
En tal sentido, Superlano instó particularmente a los jóvenes del municipio “a tomar el engaño de 15 años de la revolución como un reto” y seguir luchando sin descanso porque todos los derechos sean para todas las personas, compromiso primordial de Voluntad Popular, tomando como base la acción social y el liderazgo de abajo hacia arriba.