Un «body» negro de un material brillante, mangas de piel y unas larguísimas botas completaban el look, tremendamente sexy de la artista. Pero lo que debía haber sido una noche en la que estar guapa e impresionante, se convirtió en una de las peores elecciones estilísticas de Jennifer Lopez.
Durante la actuación exclusiva de su nuevo single discotequero, «Live it up», la actriz y cantante lo dio todo sobre el escenario. La espectacular coreografía dejó en evidencia lo escueto del «body», que tanto por la parte delantera como por la trasera mostraba más de la cuenta. En lugar de realzar su figura, conseguía todo lo contrario.