Durante una semana de febrero una veintena de voluntarios vigilaron de cerca a los perros y sus dueños. Cuando veían que se dejaban una caca atrás, el voluntario se acercaba al dueño, se interesaba por lo bonito que era el can y disimuladamente conseguía su nombre y raza. Solo con estos dos datos, los voluntarios pudieron localizar las direcciones de los dueños a través de la base de datos municipal, publica el portal Que.es
A continuación, las cacas se empaquetaban como si fueran objetivos perdidos del consistorio y se entregaban en mano a los dueños, llegando a grabar algunas de las entregas para un vídeo que muestra el desarrollo de la campaña.
Junto al excremento empaquetado se mandaba también un aviso de multa. El resultado, según ha explicado el Consistorio, ha sido un 70% menos de cacas en las calles, “no se sabe si por el miedo a la multa o por la caca empaquetada”.
TODA UNA CAMPAÑA
Además, la campaña -que ha corrido de la mano de la agencia Mccann- ha sido premiada con el ‘Sol de plata’ en el Festival Iberoamericano de Comunicación Publicitaria ‘El SOL’ y también ha tenido recorrido en Twitter bajo el ‘hashtag’ #cacasexpress.
El Ayuntamiento explica que el presupuesto era inexistente, pero la oportunidad creativa que suponía le interesó a la agencia y realizaron una original campaña: ‘Las cacas teledirigidas’, donde símiles de excrementos chocaban contra dueños incumplidores. Pero los resultados duraron apenas unas semanas.
También sin presupuesto, pero esta vez con gente del pueblo dispuesta a colaborar voluntariamente en la campaña, se inició esta nueva campaña. La aceptación de la campaña, explican desde Brunete, “ha sido buena en general, aunque algunos se han mostrado más a favor de crear espacios para que los perros puedan hacer sus ‘cositas'”. “Como en todo, opiniones para todos los gustos”, dicen.
El alcalde de Brunete, Borja Gutiérrez, asegura que “aunque en Brunete la mayoría de los dueños de perros cumplen y recogen el excremento de su mascota”, desde el Ayuntamiento invierten “muchos recursos para dar respuesta a un problema que tiene una fácil solución: que todos los dueños recojan el excremento de su mascota”.