El incendio, que se debió aparentemente a un cortocircuito en un cable, se declaró en la estación Okhotny Riad, cerca del Kremlin, hacia las 08H30 locales (04H30 GMT), en plena hora punta.
“El incendio fue dominado hacia las 09H04 Unas 4.500 personas fueron evacuadas”, indicó a la AFP un portavoz del ministerio ruso de Situaciones de Emergencia, Viktor Biriukov.
Unas 45 personas recibieron asistencia sanitaria y siete fueron hospitalizadas por una intoxicación por monóxido de carbono, según esta fuente.
Cinco camiones de bomberos y varias ambulancias rodeaban la estación cerca del teatro Bolshoi dos horas después del incidente, constató un periodista de la AFP.
Unos 300 bomberos fueron movilizados para luchar contra el incendio.
“Un cable se incendió” en el túnel, indicó Biriukov, aunque indicó que “aún es pronto para establecer las causas del incendio”.
“Médicos y psicólogos han sido enviados al lugar para ayudar a los pasajeros. Necesitan agua para lavarse la cara”, añadió el portavoz.
Un video filmado por un testigo, Alexei Surkov, y disponible en el sitio del diario ruso Moskovski Komsomolets ( http://tv.mk.ru/video/4838-pozhar-v-metro-video-ochevidtsa.html) muestra a pasajeros en el interior de un vagón, cubriéndose el rostro con pañuelos, mientras se escucha a un niño llorar.
Otros dos testigos, Dimitri Yuchmanov y Vasili Topkin, atrapados en un vagón en el momento del incendio, contaron a la radio Eco de Moscú que los propios empleados del metro parecían no comprender lo que ocurría, lo que generó el pánico entre los pasajeros, y empujones en otras estaciones de la misma línea.
“El conductor tenía sentido del humor. Después de 30 minutos de parada dijo: +No se preocupen, vamos a volver a salir pronto… a lo mejor+”, escribe @Lancaster Irina en la cuenta Twitter.
“Empujones en varias líneas, me costó escaparme de esa trampa” escribe por su lado @syrzhik.
“Los trenes ya no circulan, huele espantosamente mal. Es horroroso” escribe @karina manson en Twitter.
“Lo que pasa ahora demuestra que el metro funciona al límite de sus capacidades. Un pequeño fallo, y el infierno se expande a todas partes”, asegura también en Twitter @batsueva.
Esta situación perturbó los transportes públicos en el centro de la capital, ya que los autobuses y otros medios de transporte fueron tomados por asalto. Miles de moscovitas tuvieron que caminar a lo largo de las grandes avenidas para llegar al trabajo.
“La humareda subterránea ha paralizado Moscú”, titula el sitio de información en línea gazeta.ru.
El metro de Moscú había sido objetivo de un doble atentado en 2010 que causó 40 muertos.
Inaugurado en 1935 bajo José Stalin, el metro de Moscú –muchas de cuyas estaciones son verdaderas joyas arquitectónicas– tiene según sus dirigentes uno de los flujos de pasajeros más elevado del mundo, con un promedio diario de más de siete millones de pasajeros, durante los días laborales.