El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, rechazó una polémica sobre la opinión del ente regional respecto a la posibilidad del presidente boliviano, Evo Morales, de ir a la reelección, según un comunicado difundido este martes. AFP
Insulza reiteró su respeto a la Constitución boliviana y rechazó que existan contradicciones entre la nota que envió a La Paz el 14 de junio y otra que el Secretario de Asuntos Políticos de la OEA, Kevin Casas, dirigió el 6 de junio al expresidente de Bolivia, Jorge Quiroga, según el texto.
“Ambas comunicaciones declaran de manera explícita nuestro respeto por la Constitución del Estado Plurinacional de Bolivia y por las decisiones que emite el Tribunal Constitucional de ese país”, declaró Insulza, citado en el documento.
“Aquí no ha existido ni contradicción ni actuación fuera de los conductos regulares de la OEA y no ha habido desmentido ni desautorización alguna; por el contrario, la actuación de Kevin Casas cuenta con mi pleno respaldo”, insistió el secretario general, que viajará a Bolivia en julio.
Morales decidió semanas atrás postularse como candidato para las elecciones del próximo año, para el periodo 2015-2020, pero la oposición considera que es inconstitucional, pues arguye que en 2008 se acordó en el Congreso incluir un artículo en la nueva Carta Magna para cerrar esa posibilidad.
Por su parte, el oficialismo dice que esa interpretación fue aclarada por el Tribunal Constitucional, que consideró que el mandatario puede ir nuevamente a las elecciones.
La semana pasada, Quiroga (2001-2002) aseguró que la misiva que recibió de la OEA certifica que Morales de hecho aceptó no buscar un tercer mandato.
La OEA -según la misiva- acotó que el pacto de 2008 “fue públicamente endosado por el presidente Evo Morales”, quien -de acuerdo a Quiroga- desistió de un “tercer mandato”.
Pero la carta, entregada a la AFP, también indica que el fallo del Tribunal Constitucional boliviano “se aparta de aquella (interpretación) prevaleciente durante la negociación política” de 2008.
En ese año, la oposición de derecha controlaba el Senado y bloqueó la reforma constitucional, pues peleó hasta el final para que Morales no vaya a un tercer mandato. El oficialismo cedió para destrabar el proceso de aprobación, tras gestiones de delegados de la OEA, la ONU, la Unión Europea, Brasil, Colombia y Argentina, que facilitaron el acuerdo, recordó Quiroga.
Insulza estaría en La Paz a mediados de julio para discutir temas como la renovación del organismo y la problemática de las drogas, dijo el embajador boliviano en la OEA, Diego Pary.