Cerca de 40.000 personas han sido secuestradas en Colombia durante los últimos 30 años, un drama que persiste en este país que sufre desde los años 1960 un conflicto armado interno, según un estudio publicado por el Centro de Memoria Histórica en Bogotá.
El informe fue elaborado con información oficial proporcionada por la Policía y la Fiscalía, pero también con testimonios facilitados por organizaciones no gubernamentales.
Han sido secuestradas 39.058 personas por lo menos una vez en su vida entre 1970 y 2010, en este país de 47 millones de habitantes, según el estudio realizado por el instituto Cifras y Conceptos y financiado por la Unión Europea.
“Con este insumo el Centro Nacional de Memoria Histórica quiere proporcionar al país una fuente para esclarecer la verdad y facilitar la justicia y reparación para las víctimas de secuestro”, sostuvo esa institución pública en el documento.
“Estamos convencidos de que los datos estadísticos son una forma más de expresar la voz de las víctimas”, añadió el informe, pese a reconocer que “no existe consenso ni certeza sobre las cifras del secuestro”.
Como una radiografía del secuestro, la investigación muestra que 80% de las víctimas son hombres de entre 18 y 65 años, de las zonas rurales y cuya captura tuvo una motivación económica.
Los casos de extranjeros, pese a recibir mucha atención de los medios de comunicación, son minoritarios, representando el 3%.
El pago de un rescate es el principal motivo del secuestro (84%), que en promedio se extiende entre un día y un mes.
A la raíz de este delito se ubica el conflicto armado interno de Colombia, en el que han intervenido guerrillas de izquierda, paramilitares de derecha (desmovilizados desde 2006), y bandas criminales.
A la guerrilla Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC, comunistas), que en 2012 renunció formalmente al secuestro por extorsión económica para abrir un proceso de paz con el gobierno, se le atribuye 37% de los casos de los últimos 30 años.
En los años 1990, los de mayor auge de las FARC, se supera los 2.000 secuestros anuales. El año 2000 marca el récord total: con 3.500 personas cautivas. A partir de 2004 las bandas criminales toman progresivamente el primer lugar, y el número de rehenes baja hasta 1.252 en 2010.
Del total de secuestros, 20% de las víctimas fueron rescatadas por las autoridades, 67% fueron liberadas casi siempre a cambio del pago de un rescate, 5% logró escapar, mientras que 8% terminó asesinada, según el reporte.
Frecuente motivo de indignación para los colombianos: solo en 8% de los casos los autores fueron condenados.
AFP