El ganador del reality show Arab Idol no dejar de sumar títulos.
Después de ganar el popular concurso, el cantante Mohamed Assaf fue nombrado el domingo embajador especial por la agencia de refugiados palestinos de la ONU y el presidente palestino.
El sábado por la noche Assaf se convirtió en el primer palestino en ganar la versión del mundo árabe de American Idol, lo cual desencadenó celebraciones en todos los territorios palestinos.
Tras su victoria, el presidente palestino Mahmud Abás declaró al cantante embajador honorario. “Felicito al talentoso cantante Mohamed Assaf… quien transmitió el mensaje del pueblo palestino a la nación árabe a través de su arte”, dijo Abbas en una declaración distribuida por la agencia oficial de noticias Wafa.
También fue nombrado embajador de la juventud por la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo (UNRWA por sus siglas en inglés). La agencia administra el campamento de refugiados de Khan Yunis en Gaza, donde Assaf ha vivido desde los 4 años de edad.
“Todos los palestinos somos partícipes de su éxito”, dijo el comisionado de la agencia, Filippo Grandi.
Assaf dijo que estaba “verdaderamente honrado” por el nombramiento.
Assaf ha surgido como una inusual fuerza unificadora entre los palestinos, que están divididos entre gobiernos rivales en Cisjordania, regida por Abbas, y la Franja de Gaza, controlada por Hamas. Los palestinos esperan establecer un estado independiente en ambos territorios, así como en el este de Jerusalén.
Multitudes se reunieron en Cisjordania y Gaza el sábado para ver el último episodio de Arab Idol en pantallas gigantes. Cuando se anunció la victoria de Assaf, fuegos artificiales iluminaron el cielo.
Muchos admiradores dijeron que el talentoso artista permitió a los palestinos a olvidarse de su división política y geográfica.
Yehiyeh Musa, un legislador de Hamas en Gaza, elogió esta semana a Assaf como el “embajador del arte palestino”.
No obstante, algunos líderes religiosos de línea dura continúan criticando a Arab Idol, calificando al espectáculo de blasfemo e inmoral. AP