El nuevo emir de Catar, Tamim al Hamad al Zani, remodeló hoy el Gobierno y nombró al jeque Abdalá bin Naser bin Jalifa como primer ministro, en sustitución del influyente Hamad bin Yasem al Zani, informó la agencia oficial de noticias QNA.
En su primer discurso a la nación, el recién nombrado emir, de 33 años, ensalzó los logros de su padre, Hamad bin Jalifa al Zani, que ayer abdicó en él, y expresó su esperanza en “estar a la altura”.
El emir emitió un decreto, difundido por la agencia, con los nombres de los veinte ministros que forman el nuevo Ejecutivo.
A la cabeza del gabinete está Abdalá bin Naser bin Jalifa, quien hasta ahora ocupaba el puesto de ministro de Asuntos de Interior y que fue nombrado jefe de Gobierno y titular de Interior.
El emir designó al jeque Jaled bin Mohamed al Atiya responsable de Asuntos Exteriores, el otro cargo que desempeñaba el ahora reemplazado primer ministro Hamad bin Yasem al Zani.
Entre los nuevos nombramientos destacan el viceprimer ministro, Ahmed bin Abdala bin Zaid al Mahmud; el titular de Defensa, Hamad bin Ali al Atiya; el de Energía e Industria, Mohamed Saleh Abdala al Sada; el de Finanzas, Ali Sherif al Amadi, y el de Economía y Comercio, Ahmad bin Yasem bin Mohamed al Zani.
En su alocución, el emir, que se ha convertido en el gobernante más joven del mundo árabe, aseguró que seguirá apostando por el desarrollo económico de ese país rico en recursos energéticos.
“No somos dependientes de nadie ni esperamos que nadie nos dé instrucciones”, destacó el jeque, quien agregó que la abdicación del emir “no significa un cambio en la política del Estado” ni en la marcha de los proyectos de crudo y gas vigentes.
Señaló que su padre, que tiene 61 años y asumió el poder en 1995 tras un golpe palaciego, transformó un país anclado en el pasado y conquistó una serie de logros en política exterior, salud, deporte, educación y economía, lo que calificó de un “verdadero milagro”.
Respecto a sus nuevas responsabilidades al frente de Catar, el jeque afirmó que cumplirá con las reformas económicas, sociales, humanas y medioambientales trazadas en 2008, con el fin de que el país sea un “Estado avanzado” en 2030.
Por otro lado, el jeque Tamim dijo que respeta “todas las corrientes políticas y la diversidad religiosa en la región” y mostró su compromiso con “el deber de solidaridad y cooperación árabes” y con los tratados internacionales.
Indicó que apoya el proceso de paz en Oriente Medio y una solución que incluya la retirada israelí de los territorios árabes y los “derechos legítimos” del pueblo palestino, si bien no hizo referencia al conflicto sirio, en el que Catar apoya a los opositores al régimen de Bachar al Asad. EFE