Poner caras salvajes fue lo suficiente para que este bebé leopardo ayuhentara a una manada de chacales despiadados.
Viajando por la selva africana esta pequeña familia de leopardos, de una madre y sus dos cachorros se encontró con un pequeño inconveniente, un grupo de chacales codiciosos que buscaban su próxima comida.
Mamá leopardo pudo llevar a uno de sus cachorros en la boca dejando a su otro valiente pero pequeño-gran hermano valerse por sí mismo.
Pero con unos ojos azules sorprendentes y una feroz exhibición de destreza, el pequeño solitario fue capaz de mantener a los chacales cobardes a distancia hasta que la ayuda pudiera llegar, en forma de madre enojada. Finalmente, mamá leopardo llegó y los cachorros fueron reunidos por la mamá para continuar su viaje.
Con información de DailyMail
Fotos cortesía DailyMail