En Estados Unidos (EEUU) la industria petrolera es totalmente privada. Desde los yacimeintos hasta los puestos de embarque, pasando por pozos, poliductos, refinerías e instalaciones en general. La decisión de comprar o vender petróleo o sus productos derivados es una decisión de las empresas que ahí operan y no del gobierno estadounidense.
Desde el año 2008 EEUU, gracias al desarrollo tecnológico de técnicas de producción como la fracturación hidraúlica (fracking) se ha dado un boom en la producción estadounidense del “shale gas” (gas de esquisto), del oil gas y del factor de recuperación de pozos maduros.
Un reciente informe de la petrolera inglesa British Petroleum (BP Statistical Report Review of World Energy June 2013) señala que en 2012 se dio el mayor incremento interanual en la producción de petróleo de EE.UU. en más de 20 años.
Es así como con una producción de 8,9 millones de barriles diarios para el año 2012, EEUU produjo el 9,6% de la producción mundial de crudo y representó un aumento del 13,9% respecto a la producción del año 2011. En los últimos 5 años, 2008-2012, la producción estadounidense de crudo se ha incrementado en 31,2%, una verdadera revolución productiva.
Después de 5 años en alza, especialistas no consideran como pasajero el aumento de la producción petrolera en EEUU sino como un proceso en expansión mas allá del año 2025,
Tal aumento de la producción deméstica en EEUU ha tenido un alto impacto en los vólúmenes de importación de petróleo crudo y de productos desde Venezuela. En el año 2008, cuando se inicia el boom petrolero en EEUU, desde Venezuela se exportaban a EEUU un promedio anual de 1,18 millones de barriles diarios de petróleo y productos.
En el primer trimestre de 2013, la cantidad promedio de petróleo y productos importados por EEUU desde Venezuela alcanza la cantidad de 754 mil barriles diarios, un descenso del -20,7% respecto al año 2012 y del -36,53% respecto al año 2008.
Se ha dado entonces dos curvas similares, de sentidos inversos, pero de efectos desvastadores sobre la economía nacional: Mientras aumenta vigorosamente la producción de petróleo en EEUU se reducen drásticamente las importaciones de petróleo desde Venezuela, importado en su totalidad por empresas privadas que pagan la factura con apenas una semana de plazo.
Es así como la caja de Pdvsa se ha visto en aprietos, que pudo llenar con dinero proveniente de créditos, pero que agotados éstos, han secado el mercado de divisas este año.
La situación parece no revertirse en ningún futuro predecible. Tenemos entonces que quienes pagan el petróleo “cash” cada vez nos cormprarán menos. Esas empresas se guian por la racionalidad económica de los mercados y no por la ideología de los gobiernos. (LP)