“Siempre quise abrazar a un animal”, confesó Lauren Fagen, de 18 años, que trabajaba voluntaria en el centro de rehabilitación para animales Moholoholo Wildlife en Sudáfrica. El incidente ocurrió el lunes cuando Fagen limpiaba la jaula de tres leones.
La joven, que siente amor hacia los animales sobre todo hacia los felinos, se acercó a Duma, un león macho de cinco años y lo besó. Lógicamente el animal no se lo esperaba y atacó a la joven.
La pelea se agravó cuando dos leones hembra se unieron al ataque. Como consecuencia sufrió cerca de diez heridas superficiales en las piernas. A su rescate fueron algunos estudiantes voluntarios que trabajaban en el centro, lo que al final la salvó.
“Debería haber muerto o perdido una pierna. Es un milagro que sobreviví. Podría haber muerto de hemorragia”, dijo en un comunicado Fagen. Brian Jones, fundador del centro, comunicó a su vez que suelen advertir a los voluntarios sobre el riesgo que corren al trabajar cerca de los animales y sugirió que es la joven la que tiene la culpa en este caso.