Tras el allanamiento realizado por el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) a una clínica clandestina en El Trigal donde aplicaban biopolímeros, otros centros estéticos serán inspeccionados para descartar esa práctica.
El miércoles fue allanada la casa número 99-11 donde funcionaba un centro dedicado a tratamientos estéticos con biopolímeros marca Biofil, por lo que fueron detenidos una médico cirujano de 49 años, dueña del centro, y un joven de 26, ambos de apellido Torrealba. En el lugar había medicinas vencidas y materiales quirúrgicos.
El comisario jefe del Cicpc subdelegación Las Acacias, Alexis Herrera, comunicó que aparte de la denuncia por la que inició el procedimiento, no han recibido más. Sin embargo las investigaciones continúan para conocer el origen de los productos médicos incautados y descartar la existencia de otros establecimientos en los que se estén aplicando biopolímeros.
Texto diario El Carabobeño